N. Yuu.
- Han pasado dos... Dos desde que perdí la vista. Dos desde que... Lo perdí...
"Vivía a mi cuidado, pero no siempre fue así. Antes de aquel accidente, pasamos tres años juntos en los que huimos de su familia, a pesar de que esta no hizo esfuerzo alguno por encontrarlo...
¿Me juzgarás por llevar conmigo a un país diferente a un joven autista? No espero que entiendas que sólo pensaba en lo mejor para él... Porque, al estar enamorado, necesitaba tenerlo conmigo y eso podía ser a la vez, más que sólo parte del sentimiento de protección, parte del egoísmo que se incluye dentro de cada gran pasión... Sobre todo, ese sentimiento de querer poseer lo que se sabe jamás podrá ser totalmente tuyo...
Pero algo era totalmente cierto; mi pequeño autista vivía un infierno en su casa y desde la primera vez que presencie ese cuadro me jure a mi mismo que lo sacaría de esa casa donde sólo era objeto de burlas; era un objeto de prueba, hacían experimentos con él, ya que al carecer de expresiones y en cierto modo, en algunas ocasiones no mostraba algún tipo de emoción... ¡A eso no se le podía llamar familia! Yo... La noche en que logramos salir de ese lugar, La madre del chico logro hacerme una pequeña herida con un cuchillo..."
Levanto un poco su camisa mirando a la nada... Tal vez a los recuerdos...
- No fue nada... - Toque la pequeña cicatriz y esbozó una leve sonrisa - Lo mejor estaba por venir...
"Con miedo, así era, miedo a que su familia nos buscara, decidí llevarlo lejos... Sólo lo más lejos que pude: a casa de mis padres, en Suiza.
¿Qué sucedió? Nada.
Nunca hubo noticias de sus padres y yo... Sí, trabaje mucho para sacarlo adelante. Lo lleve a que tomara la atención necesaria y muchas veces tuvo ataques contra mi, más todo lo que paso a lo largo del tiempo lo valió para verlo sonreír una vez más...
Eso fue hasta que ocurrió... Aquel día en el parque..."
Tal vez él no lo sabia pero su mano apretaba la mía con una fuerza increíble. Sus ojos aparentemente sin vida ahora derramaban lágrimas de dolor puro.
...
N. Asahi.
¿Y? ¿Qué se supone que haría?
Un peli rojo, el cual había robado mi corazón... Había dejado el celular en uno de los sillones de mi casa...
¡Sí! ¡El maldito problema eran los mensajes que no dejaban de llegar de parte de ese estúpido...!
Ya no pude más. Rompí a llorar en la esquina de aquella sala con el celular de mi amado entre las manos, como si eso fuese el único recuerdo de él que pudiese tener.
...
Pero, ¿Cómo comenzó todo? Hace años...
"Sabia que Iseki Rui, mi mejor amigo en ese entonces, tenia un secreto que no me había querido contar... ¿Cómo me di cuenta? ¡Fácil! Todo el día, todos los días escribía en un cuaderno que no le enseñaba a nadie y cuando no era así, Rui pasaba el tiempo pegado a la pantalla del celular.
Un día, en broma le dije a Rui que si no me decía su oscuro secreto lo besaría... Eso pareció aterrarle así que sin decir absolutamente nada, comenzó a forcejear conmigo. Entre juego y juego termine besándolo, a lo cual... Surgió otro beso y otro... Así hasta que, al día siguiente, decidimos comenzar a salir, sólo por curiosidad.
Pasó la semana y los dos estábamos bien, así que Rui me contó acerca de ese algo que escondía... Su hermano.
Me contó que aún mantenía comunicación con él, que le escribía sin decirle quien era y, sobre todo, me dejo ver una foto de Yuu.
Eso fue... Malo, sí.
Poco a poco me fui interesando tanto en Yuu que, cada vez que sacaba el tema, Rui se molestaba a tal grado que un día decidió que lo mejor sería romper.
¿Amigos? Pero no como lo éramos antes. Y..."
- El conocer a Yuu... Definitivamente cambió algo en mi... - Un nuevo mensaje - Yuu, te amo, Tomatito...
___
Y que tal? Quieren conocer la versión de Rui al respecto? *Mordida al tomate* Aunque no quieran, así será!
Y no me vengan a decir que no identifican al otro personaje porque... Por favor! *se pone una pistola en la sien mientras muerde el tomate*
Sean felices!
