Monster - Yoonmin

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Su vida hasta ese momento se podía decir que era completamente deprimente, sin nada de color o brillo, no tenía nada a lo que debiera aferrarse o esforzarse por sobrevivir, estaba solo y abandonado en el mundo, teniendo lo mínimo para vivir y a veces nada.

Era un huérfano débil, delgado y pálido, era un niño más su aspecto podría asimilarse un poco al de una chica.

Y, al parecer a los hombres a veces solo les bastaba un rostro bonito y un agujero donde poder saciar su apetito sexual...

No quería seguir de esa forma, así que, si no tenia quien pintara su vida de colores, el lo haría y la pintaría de un hermoso color carmín y lo mejor, una pintura de la mejor calidad posible, sangre de inocentes o idiotas.

Si no tenía a alguien que le diera una salida de su perdición, el lo haría y sin dudar de cualquier acto u acción.

Vivía de esa manera, acabando con aquellos que no sabían apreciar la buena vida que llevaban o quiénes interferían en sus planes.  No entendía como algunas personas no aprovechaban las pocas cosas buenas que la detestable vida les ponía enfrente.

Los odiaba y aborresia, el había crecido sin nada, subsistiendo solo y luchando por no morir entre las sucias calles, la gente inconsciente le hacían querer vomitar y sentir una sed de sangre por dentro, acabaría con todo aquel que se creyera con los peores problemas sin que los tuviera.

Mas sin embargo algo que no estaba calculado en sus planes era que un hermoso rubio se cruzara en su camino y sin siquiera pedirlo el había llegado a cambiar su vida y colorearla de hermosos colores y aumentar el carmín de su mundo. 

Había matado al único ser que el rubio tenia en la vida y no parecía enojado o afectado respecto a lo sucedido en la noche de su encuentro.

 Todo en el había cambiado en esa noche, no esperaba que aquel chico se aferrara a su enfermo mundo y lo siguiera a pesar de todo.

Sabia que era arriesgado, pero ahí estaba.

Sabia que era algo enfermo, pero ahí estaba.

Sabia que era un monstruo y un asesino, pero ahí estaba.

Con aquella sonrisa resplandeciente y tratando de que su mundo no se pudriera más de lo que ya estaba. El calmaba levemente su sed de sangre, pero no lo detenía, todo lo contrario, lo alentaba y ayudaba.

Miraba esos ojos avellana y sentía que su mundo estaba ahí, que todo se podía ir a la basura pero eso no le importaría desde que el estuviera ahí tomando su mano y besando sus labios en cada oportunidad que tuviera.

Sabía que lo necesitaba en su vida, pero tanto tiempo viviendo en la soledad le había enseñado que no se puede confiar en cualquiera y a pesar de su imagen angelical el chico podría estar escondiendo cosas, todos lo hacían.

Así que...

¿Cuál es la mejor manera que tiene un asesino para confiar en alguien más...?

Matar  y matar por amor...

Un puro y enfermo amor...

Y sin importar cuántas veces le diera la pistola o cuchillo al chico con una víctima en frente el no dudaría ni un segundo en acabar con las respiraciones de la persona, para después correr a sus brazos y besarle con necesidad y dulzura, como si no pudiera vivir sin sus besos o si éstos le hicieran olvidar que acababa de cometer un crímen.

Parecía que el acabar una vida por el no era importante, por qué la vida de Park Jimin no era nada hasta Min Yoongi, y apesar de todo el pasado de este, el tampoco consideraba eso una vida hasta el rubio.

Eran dos chicos destruidos por la humanidad y el mundo, que de alguna forma se juntaron para sanar sus heridas mutuamente sin importar los riesgos de por medio.

Ellos vivían su amor entre roja y espesa sangre, mientras muchas personas vivían aterrados sobre sus actos crueles y viles ante sus ojos.

Más eso no le importaba a Min mientras pudiera sostener la pequeña y delicada mano de Jimin con la suya o verlo despertar cada mañana con el cabello despeinado y la cara levemente hinchada o aún mejor, recibir algún cumplido o mimo rápido del chico, no importaba que fuera desde que Jimin estuviera con el todo estaría bien.

Porque Jimin lo hacía feliz...

Pero...

No todo podía ser felicidad en su vida...

Porque el estaba destinado a la tristeza en su vida...

†††

¡¡Regrese!!

Esto es algo que ya debí actualizar hace mucho tiempo...

Pero no tenía NADA de inspiración hasta hace poco (además de que una linda chica me subió el ánimo para actualizar)
Esto según debí subirlo desde el sábado pasado, pero aún no estaba terminando, luego lo aplace al viernes, pero fue una semana verdaderamente sofocante y estresante que ni siquiera tuve un respiro para terminar de escribir así que por eso apenas lo estoy subiendo.

No es como si alguien lo espere, pero, de todos modos tenía que dar una explicación.

El capítulo no es gran cosa sobre la historia (me refiero a sucesos), no planeo terminar esto feliz.

Pero será lindo❤

Creo...

Perdón por cualquier falta de ortografía o incoherencia, apenas termino y lo estoy subiendo.

By: Mei†