Capítulo cuatro: "Megatron dirvitiendose"

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Solus no sabe con certeza que es lo que sucede realmente. Sabe que volvió de la muerte a causa del energon oscuro y que de alguna forma eso es malo, muy malo. Pero aún así, no puede explicar esa extraña atracción exagerada hacia Megatron, ahora lo llama por Lord o amo y simplemente Megatron.

Inconscientemente ordena todo lo que le pide y siente todo lo que él siente, quizás sea el efecto del energon oscuro y quizás, nunca dejo de quererle.

No sabe nada de sus antiguos compañeros, no sabe nada de Optimus, ni de los niños humanos. Megatron le contó que había destruido su antigua base y por alguna razón, no sintió ni la más mínima pizca de resentimiento o tristeza, le daba igual si estaban vivos o no.

Aunque, cierto mech la traía confundida. Le prometió a Ratchet que siempre estaría para él, pero extrañamente, ya no podía verlo ni mucho menos oírlo. Se encontraba como en una especie de limbo hasta que Megatron la rescato de ahí.

Quizás hayan nuevos integrantes, nuevas femmes y nuevos amores.
Megatron también le comento que… Megatron, Megatron, Megatron, maldición. Se estaba volviendo loca, sólo pensaba en ese mech día y noche, su relación con él se ha vuelto más unida que nunca aunque no sean nada oficial. Ya sabes, se gustan, se aman, se besan, parecen pareja pero no lo son. Un clásico.

Shockwave volvió, con una peculiar mascota. Un predacon, sin designación oficial, Starscream es su encargado, ese mech cobarde y tedioso, su relación con él no es la mejor pero tampoco la peor. Con Shockwave es algo diferente, ya que Megatron le ordeno que le hiciera algunas modificaciones a su cuerpo, en otras palabras, Megatron está de acuerdo con que Shockwave experimente con su cuerpo. En el lapso que pasan juntos, ella en la camilla y él inyectándole cosas, Shockwave le pide que le cuente historias sobre Primus, sus hermanos, Unicron o cosas así por el estilo. Su relación con Soundwave… Bueno, ya sabe cómo es él, pero, a diferencia de los demás, ella no le gritan con arrogancia ni desprecio, ella lo trata con comprensión y amabilidad, cosa que el mech morado agradece bastante. Por fin alguien diferente en esa aburrida nave-ahora base. Con KnockOut es con quien mejor se la lleva, hablan de cosas irrelevantes, salen a pasear, son buenos amigos, aunque algunas veces la desespera hablando de su apariencia física y así, a tal punto de llegar a tener pequeñas peleas donde uno termina enojado con él otro, hasta que alguno de los dos deje su orgullo de lado y decida hablarle al otro. Por lo general, cuando Solus va a hacerlo, él también va. Y el predacon… Bueno, ella vio surgir la vida y cada vez volverse más superior y fuerte la vida en cybertron, así que por ende, sabe perfectamente que el predacon es un mech en su modo bestia.

Quizás el predacon no se percate de esa habilidad debido a que fue creado por Shockwave en un laboratorio, lo que lo priva de sus conocimientos y costumbres de predacon. No se ha dignado a decirle a nadie ni lo hará, eso es asunto del predacon y supone que lo hará cuando sea la hora, también quiere que se dé cuenta de que es un ser inteligente por sí solo.

—¿Qué haces aquí sola?— Pregunto Knock haciéndola pegar un pequeño brinco por la impresión.

—Sólo pienso— Le respondió, viendo como el rojizo se sentaba a su lado.

—Está un poco alto, ¿No te da vértigo?— Pronuncio mirando hacia el abismo. Se encuentran sentados en la orilla de la zona de aterrizaje y despegue de la nave, sus piernas cuelgan, dándole una sensación extraña.

—No, es lindo— Giro su cabeza hacia KncokOut sonriéndole maliciosamente.

—Oh, no. Conozco esa mirada, sea lo que sea que…—
Solus no lo dejo terminar lo que estaba diciendo, ya había saltado al abismo. Antes de caer, sujeto a KnockOut, llevándoselo hacia el suelo.

—¡ESTO ES DIVERTIDO!— Grito debido a que el aire de la caída bloqueaba un poco el sonido. Volteo su cuerpo de tal forma que pudiera ver con perfecta claridad a KnockOut, dándole la espalda al suelo.

—¡ESTAS LOCA MUJER. VAMOS A MORIR!— Gritaba el pobre mech desesperado con miedo.

—¡OIGAN! ¿¡QUE DEMONIOS CREEN QUE HACEN!?— Ambos calmaron sus gritos de desesperación y diversión, clavando su mirada en el jet gris que volaba a su par. Es Megatron.

—¡DIVERTIRNOS! ¡ESA NAVE ES DEMASIADO ABURRIDA, DEBERIAS HACER LO MISMO MEGSY!— Le grito la femme soltando una carcajada. El mech sólo gruño en respuesta al escuchar que lo llamo por el ridículo apodo que le había puesto, haciendo que Solus soltara otra carcajada.

—¡NO TENEMOS TIEMPO PARA ESO, LO SABES SOLUS!— Le respondió transformándose y acercándose a ella para tomarla de la cintura y pegarla a él.
—¡EJEM! ¡YO AÚN SIGO CAYENDO AQUÍ CON USTEDES! Por cierto… ¡AYUDA!— Empezo a suplicar KnockOut.

—Tus chillidos de femme desesperan, lárgate— Le hizo un ademan al predacon de que se lo llevara. Este obedecio cargando al doctor en su lomo, volando nuevamente hacia la nave.

—Era divertido verlo asustado y desesperado— Le dijo Solus a Megatron sonriendo con culpabilidad.

—Eres malvada— Le dijo con ironia Megatron cerca de sus labios.

—Aprendi del mejor— Sonrio Solus soltándose de los brazos el mech— Atrapame si puedes— Se inclino hacia adelante, apresurando la caída.

Megatron sonrio divertido, siguiéndole el juego a su femme. Solus se balanceaba en el aire como si pudiera volar, abria sus brazos y se iba hacia arriba, se inclinaba y apresuraba la caída, se movia a los lados a tal punto de incluso poder hacer un circulo perfecto. Se divertia, se estaban divirtiendo.

¿Quién lo diría? El líder tirano de los decepticons divirtiéndose con una femme. Pero como todo bello momento, debe ser arruinado.

Nada es color de rosa, mucho menos en una guerra.

Falling Inside The Black ([Pausada])Donde viven las historias. Descúbrelo ahora