Cronicas X

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Nublado estaba el dia, el sol no daba señales de estar cerca, yo caminaba de vuelta a mi casa después de otro pesimo dia de clases y una práctica sin progresos en boxeo. Los dias se volvían meses desde el fallecimiento de mi padre, no hace más de 3 meses que sucumbio ante la pulmonia que con coraje ocultaba frente a nosotros.

Mantengo ese recuerdo  de  aquel dia mientras mis pies siguen moviendose hacia adelante, como si fuera involuntario. Nada parecía ser distinto a otros dias, pero...

Unas calles cerca de mi casa, me topé de frente con un asalto, una chica estaba siendo intimidada por 2 sujetos, los cuales iban armados de cuchillos y corta cartón. Estaba inmóvil, no sabía si ayudar o no, pero algo en mi cuerpo hizo que rápidamente reaccionara, dejando mi mochila de lado y saltando hacia uno de ellos, propine un golpe certero a la mandíbula del tipo que llevaba el cuchillo, no pude si quiera ver si lo deje inconsciente o no, cuando el otro sujeto clavo en mi el corta cartón justo al costado de mi abdomen, el dolor era atroz, grite con fuerza, me arrodille tratando de soportarlo, y me da una patada en el estómago dejándome ya tirado en el suelo quejándome,  el otro sujeto se levantó del suelo algo aturdido por el golpe. Me vio tirado, tratando de aguantar la hemorragia que sufría, saco de su chaqueta una pistola que tenia y sin ningun remordimiento disparo a quemarropa hacia mis extremidades, me dió 2 disparos en los brazos y 4 en las piernas. Yo del dolor me desmaye, sabria que no sobreviviría a tales heridas.

Cuando despierto, me encuentro en una camilla de hospital, estaba en una sala vacía, sentada a mi lado, estaba mi madre, la mujer que con gran esfuerzo a permanecido optimista frente al fallecimiento de mi padre. Dormida, quizás espera a que despierte, estaba por hablarle cuando me di cuenta que mi cuerpo no reaccionaba, mis brazos estaban inmoviles y mis pies no se movian, me estaba desesperando cuando la puerta de la sala se abrio y entro un medico, mi madre despertó por el ruido y se alegró de ver que haya despertado.

El doctor había venido a verme, dado que desde la ventanilla al lado de la sala pudo ver que desperté.

-Ithan...como te sientes?- Pregunto el doctor

-Como cree?! no siento nada del cuello para abajo!…-

-Ahh….me temía esto….lamento informarte que, debido a las graves lesiones que sufriste por los impactos de bala, quedaras cuadripléjico…-

Quede atónito ante tal noticia, estaba acabada mi vida, mi madre no paraba de llorar, es algo ironico, no? Por defender a una chica mi vida….mi cuerpo…..

-N...No hay nada que se pueda hacer?....- Pregunté

-En casos como este….la medicina no puede hacer nada, lo siento- Respondió el medico

-....pero...y la ciencia?- Dijo una voz ronca en el marco de la puerta.

-Quién es usted?- Pregunto el medico

-James William Sworth, Servicio Secreto, estoy aquí por usted, sr.Ethan, me entere de su accidente, muy trágico-

-.....dijo usted….que la ciencia si puede ayudarme-

-En efecto! Pero….antes de explicarle, le pediré a tu madre y al médico que si por favor, pudieran retirarse.

Mi madre dudo un momento, pero el medico le pidió que le acompañara a ver los resultados de mi examen.

-Bueno, señor….em... James!....cómo exactamente que puede ayudarme?-

-Lo que le dire es extremadamente confidencial y no debe salir de nosotros…..hemos experimentado hace mucho tiempo sobre una sustancia que reemplaza la sangre y órganos del cuerpo, haciendo que al que lo porte, una increible regeneración, fuerza sobre-humana, capacidades que solo podrias soñar.