El día en que Bakugou dejó de oir

Bakugou sabe que las vendas en las manos no son la razón por la que esta ahí, su mirada se traslada en intervalos en los lugares de la habitación cubierta de blanco y celeste pálido, la televisión esta apagada y puede concluir tras mirar por la ventana que ya es de noche. Él esta sentado con un semblante demasiado calmado para la situación. Una emfermera entra a la habitación y él no es consiente hasta que aparece en su campo de visión, no dice nada y se retira, Bakugou concluye que es inútil dirigirle la palabra. No oye, no oye absolutamente nada y es eso lo que evita que no este en su casa ahora mismo.

El recuerda estar peleando con una gran cantidad de villanos en la mañana, cerca de las afueras de la cuidad, todo estaba perfectamente bien de no ser por la insoportable peculiaridad de uno de ellos que se habia mantenido en un bajo perfil todo el tiempo y cuando la gran parte de sus colegas había caído, se alzó entre todos ellos y gritó. Katsuki nisiquiera sabría si decir que era un voz por lo agudo del sonido, como un pitido al colgar el teléfono que seguía continuamente y se hacía más agudo mientras se acercaba, conocía la sensación por que le era usual que pasase cuando peleaba, la diferencia caía en que esto era muchisimo peor. Sabía que los refuerzos llegarían en cualquier momento aunque el no los hubiese pedido, llegaría la policía para hacerse cargo de los delincuentes que perdían la conciencia en el suelo. Y el haría su trabajo y acabaria con todos, Katsuki se acercó lo suficiente para atacar y el pitido paró, sus oídos zumbaron y la explosión que impactó contra el villano fue suficiente para noquearlo, dejó una onda y ráfaga de viento como usualmente lo hacía, el olor a humo que se esparció rápidamente. ¿Por qué no había el sonido característico de la explosión? ¿Por qué parecía que tubiese la cabeza metida en el agua?. Recuerda haber creado más explosiones  después de eso, las dirigía hacía el cielo o algun punto que no perjudicara pero no se oia nada, no importaba que tan grandes las estaba haciendo. No había sonido, y una niebla de color rosa que no vio venir cubrió sus alrededores, borroso , borroso, borroso y el cayó.

La puerta se abre y Kirishima es una pincelada de color en el cuarto, sus mechas rojas lacias, se le pueden ver las raíces de color carbón asomarse, trata de apaciguar la preocupación en su rostro y Katsuki  lanza una sonrisa floja que podría considerarase una mueca.

Eijirou es su contacto de emergencia hace más de dos años y aunque no lo fuera la gente siempre le llama a él si se trata de Bakugou. Un hombre de edad avanzada trae consigo una pizarra pequeña. Ambos mueven los labios, a él le duele la cabeza y esta apunto de quejarse por que son ruidosos, pero no lo son, Y Bakugou cree que eso es peor.

La conversasión con el médico resulta de lo más fastidiosa, todavía boquea cuando le entregan la pizarra con un marcador azul y es extenuante el no saber si ahora mismo esta haciendo algun sonido extraño, si respira fuerte, o chasquea los dientes. Él lee que el uso de audífonos funcionaran para contrarestar el problema de audición, que a pesar de todo no la ha perdido por completo, pero su rango esta considerablemente reducido. Es toda una mierda que le deja impotente, y le causa aflicción.

Kirishima esta a su lado y  responde gran cantidad de preguntas, así que es quien se encarga del papeleo y le sirve como  pilar emocional a Katsuki.
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Probablemente Bakugou no haya tomado un descanso hace más de un año y piensa que esta no es la mejor forma para hacerlo. Él esta bien, pese al impacto inicial cree que martirizarse por lo sucedido es inmaduro, en especial cuando el antes ya era levemente conciente de los problemas auditivos que aveces se hacían presentes. Lo toma con calma, y pide un permiso de una semana en la agencia para la que trabaja. No menciona debido a qué, y prefiere mantener todo lo más discreto posible dado a lo controversial que resulta su imagen en el público.

Debe hacer un revisión completa y le toman las medidas para los audífonos que usará,  KIrishima le muestra a Katsuki unos del mismo modelo y es sorprendente su tamaño, el tamaño de la punta de su dedo índice y ya puede verse perdiendolos en alguna ocasión. Son audifonos ITC con mejoras extras que el equipo de mejoras de héroe se encarga de hacer, la solicitud es enviada y le informan que solo demorara dos días.