Buy me a kiss 💋 Kookmin

Kiss kiss

"Y más te vale reponer ese jarrón, Jeon Jungkook", esas habían sido las palabras de su madre al ver la pieza hecha pedazos.

Por eso, en ese instante, montaba una estructura de madera con un gran cartel rosa que decía en letras negras  "Kiss kiss". Sí, su gran plan para reponer el dichoso —y carísimo— jarrón había sido vender besos en San Valentín por la módica cantidad de 57 ₩*.

A penas se sentó tras la improvisada estructura, un par de jovencitas se pusieron frente al puesto para comprar un beso del chico pelinegro.

Y así pasó su día, lento, mientras juntaba poco a poco la cantidad que necesitaba. Se estaba fastidiando de estár allí sentado, estaba atardeciendo y el sólo quería ir a casa; o mejor aún, regresar en el tiempo y, en vez de ser tan flojo e intentar alcanzar su celular desde el sofá y después tirar el jarrón, ponerse de pie a tomarlo como la gente decente. Pero, "¿qué puedo hacer?", se decía a si mismo, "lo hecho hecho está".

Comenzaba a arrepentirse de la grandiosa idea que le había dado su amigo Namjoon. "Será fácil, sólo un piquito y ganarás bastante." "¿Fácil?" Se cuestionaba ahora; no era fácil fingir que no se asqueaba de besar a tantas personas en un tan corto tiempo.

Su día estaba siendo una completa mierda, de eso no había duda. Sin embargo, a lo lejos, divisó una silueta conocida, con su cabello rosa y su sonrisa tan dulce como caramelo. Era él, su Jimin, su amor platónico, luz de sus ojos, estrella brillante, sensación etérea, ángel en la tierra... Y la lista seguiría porque Jimin era su todo.

Lo miró como un bobo enamorado, con una tonta sonrisa y suspirando de amor. Estaba completamente hundido en una trampa de dulce miel que el pelirosa le había tendido desde la primera vez que le vió.

De a poco el pelirosa se acercaba a su lugar, saludándole con una tímida sonrisa. Estaba a punto de pasar de largo, pero de Jungkook salieron palabras inesperadas hasta para él mismo.

—Hey Jimin, cómprame un beso.

—¿Q-Qué?

—Por sólo 57 ₩.

—Y-yo no lo sé...

—¡Vamos Jimin! —exclamó el castaño que le acompañaba— No seas aguafiestas y compra un besito.

—Está bien...

Está vez, Jungkook sonrió ampliamente y salió de detrás de la estructura. Pudo notar el nerviosismo de Jimin, así que le tomó de las manos y, lentamente, se acercó a él hasta depositar un acendrado beso en sus labios.

Al separarse, las mejillas de Jimin ardían, como si el mismísimo sol hubiese puesto sus manos en él.

—A-Aquí tienes...

El pelirosa estaba a punto de poner el dinero sobre la madera, pero Jungkook le detuvo tomando su mano.

—No —dijo mirándole a los ojos— para ti todos mis besos son gratis.

*57 ₩ = 1 MX

Es una cosita muy pequeña porque no hay tiempo andngmg y probablemente en sus países ya no sea San Valentín, pero en el mío aún es 14 gg

Espero les haya gustado y gracias por leer 💕💕💕