Se nos ha hecho tarde, amor.
La comida se ha enfríado,
y el vino fuera de la nevera nos pide a gritos que le probemos.La mesa está puesta,
solo faltamos nosotros dos.Las velas se consumen.
Y las copas ya estan estallando contra la pared.
¿Dónde estás?
Mi maquillaje empieza a correrse, mi cara está llena de lágrimas negras.
¿Dónde estás? - me vuelvo a preguntar.
Once...
Doce...
Una...
Tarde.
Demasiado tarde.
Llamo a un taxi mientras te escribo una nota: «No puedo soportar mas tus tormentas, me han quemado tanto que ya no puedo pensar por mi, espero que donde quieras que estés, estés bien, no intentes llamarme, ni buscarme, ya es demasiado tarde para volver, adiós corazón.»
Adiós corazón. -dije con lágrimas en los ojos y cerrando la puerta.