Prólogo

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Ahí estaba yo, sintiendo como la vida se me iba entre las manos, y ¿Cómo no sentirme así? Después de haber recibido un impacto de bala por la espalda. Lo único que podía escuchar en ese momento eran los gritos de Taehyung, quien trataba de sostenerme mientras mi cuerpo iba cayendo rápidamente al suelo, aunque para mí todo pasaba muy lento, demasiado, a decir verdad. Mis ojos solamente podían percibir el rostro de Tae, quien tenía mi sangre empapando sus manos, y yo no sabía qué pensar, ¿Sería está la última vez que tendría la oportunidad de mirar esos hermosos ojos rasgados con su doble párpado que los caracterizaban? ¿acaso no volvería a mirar ese pequeño lunar que tenía en la punta de su nariz?, En realidad no lo sé.

 Lo único que podía escuchar en ese momento era la voz grave de Taehyung quien no dejaba de gritar con desesperación mí nombre, no paraba de pedirme que no lo dejara. Comencé a sentir cómo sus cálidas lágrimas caían sobre mí rostro y lo único que hice fue levantar mi mano con la poca fuerza que me quedaba para secar sus lágrimas y sentir su hermoso rostro, quizá por última vez, él solamente alzó una de sus manos cubierta totalmente por mi sangre para sostener mi mano sobre su rostro, y acariciar cada uno de mis dedos, cubriendo de sangre aquel anillo que él mismo me había dado hace algunos meses. Sentía como el frío recorría cada centímetro de mi cuerpo, hasta que mi vista se comenzó a nublar y los gritos de Taehyung cada vez se escuchaban más lejanos.

Learning to Fly TogetherDonde viven las historias. Descúbrelo ahora