LIENZO 10

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Peter me preparó un chocolate caliente para tranquilizarme y hacerme sentir mejor, pero lo que realmente lo consiguió fue la forma que me trataba

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Peter me preparó un chocolate caliente para tranquilizarme y hacerme sentir mejor, pero lo que realmente lo consiguió fue la forma que me trataba. Su faceta atenta y romántica comenzaba a encantarme y a dañarme la mente con pensamientos que iban desde lo más puro y hermoso hasta la mayor lascivia que podía albergar un ser humano.

Pero era una criatura desconfiada, anclada en la penumbra de una melancolía que parecía ser eterna entre cuyos recovecos ansiaba perderme. De esos detalles no podía olvidarme ya que formaba parte de lo que era la persona que conseguía hacer estragos en mi fuero interno.

Y eso era tremendo problema, ya que con él a cada paso que daba retrocedía veinte más; era frustrante y agotador. Pero algo había en él que me hacía querer continuar desvelando los entresijos de esa alma atormentada.

Quizás era una demente la cual no se daba cuenta del hermoso tiempo que se le escapaba entre los dedos, pero en el juego del amor tanto mortales como inmortales, siempre perdíamos, aunque tuviéramos las mejores cartas.

Solo quedaba resignarnos.

En aquel sillón con una traza en mis manos y a Peter expectante al frente, decidí desvelar una de las parcelas ocultas de mi vida. No sin atrancarme varias veces y beber del contenido de aquella taza que amenazaba con resbalarse entre mis temblorosas manos. Respiré hondo reuniendo todo el coraje que aún me quedaba e imploraba de que Peter no me juzgara o bien me mirase con rostro apenado compadeciéndose de mí.

Comencé a hablarle sin apartar los ojos de sus pupilas dilatadas quizás por la expectación de saber lo que guardaba para mí.

—Mi madre siempre tuvo un trabajo que le ocupaba mucho tiempo y viajaba mucho. Al principio siempre se quedaban las vecinas a cuidarnos a mi hermano Jonan y a mí. Él y yo éramos más que inseparables; lo compartíamos prácticamente todo y era mi único amigo. Podría haber dado un brazo o la mano con la que pinto por él sin pensarlo dos veces. No tendría duda alguna si en el pasado tuviera que elegir entre mi hermano o la capacidad de crear arte.

Peter tomó mi mano libre, acariciándolo con el pulgar para darme fuerzas. Le agradecí ese simple gesto en silencio.

Proseguí.

—Hace menos de un año, antes de venir a Mistery Spell, mi madre tuvo un viaje de varios días, pero como mi hermano y yo éramos mayores no se preocupó porque sabía que todo estaría bien. Jonan y yo vimos películas, pedimos pizza para cenar y pasamos un día muy agradable en compañía. Cuando se hizo de noche yo fui a acostarme pero Jonan decidió quedarse un rato más en el salón. Al cabo de un rato de estar dormida, mi hermano toca la puerta me despierto, él se acerca y me pregunta, "¿Puedo dormir contigo?" y yo le respondo que sí porque eso era algo que hacíamos cuando mamá se iba de viaje y nos quedábamos solos.

Pero aquella noche, todo cambió. Mi hermano, aprovechando que dormía, deslizó su mano por debajo de mi camiseta y me tocó un seno. Cuando me di cuenta, me desperté sobresaltada e intenté huir de sus brazos; nunca olvidaré lo que me gritó:

Touch My Soul (Is It Love?Peter)[TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora