Ayer cuando te fuiste me tomo como 5 minutos pensar que no puedo estar bien cuando te vas así, disgustados los dos.
Entonces tomé mis llaves, mi cartera con aproximadamente 100 pesos, y salí de casa aceptando lo que se me atravesara.
Regresé, me puse la pijama y me preparé para dormir. Eran ya casi las 12:00 AM y me quedé sentada en el sofá de arriba, contemplando a la nada, entre el silencio y la oscuridad comencé a sugestionarme por cosas insignificantes en nuestra relación. ¿Será que después de esto preferirá alejarse? ¿Ya no me quiere? ¿En realidad me necesita como dice? Pff, no lo necesito si se va.
Y me solté a llorar, cuidando que mi hermana no escuchara, decidí no dormir en mi recámara y me fui a dormir con mi abuela, necesitaba un poco de calor de alguien que amo.
Entre los ruidos de la televisión y la poca brisa que entraba por la ventana, volví a pensar en ti y todo lo que comenzabas a causar, soy muy dramática y me tuve que resistir a no llorar porque mi abuela estaba a un lado mío.
Entre lamentos internos, enmedio de las madrugada, me daba cuenta de lo mucho que te quiero y efectivamente, no te necesito para vivir, pero haces que todo sea mejor cuando estamos juntos y que de alguna u otra manera necesito un poco de ti para estar en constante movimiento. Me haces pensar que no sé lo que estoy haciendo y sintiendo, que no te puedo obligar hacer algo que no quieras, como quedarte.
No sé si estás preparado para tener que soportar mis delirios.
Me llenas, completamente y amo disfrutar de ti y de las pequeñas o grandes sensaciones que me transmites y que quizá en ningún momento estaré preparada para cuando decidas irte.
Te amo, hoy y siempre

ESTÁS LEYENDO
Ayer
RomanceEsto lo escribí el 16 de enero, después de una discusión que odio recordar. ¿Les ha pasado? el sentimiento repulsivo, un agobio terrible y ni una sola palabra que pueda justificarte. Eso me pasó.