Ya había sufrido suficiente, y aunque en su interior algo le decía que seria ella, no quería cantar victoria antes de tiempo, necesitaba confirmarlo, no quería ser victima de una nueva desilusión, no lo soportaría. ¿Por que tenia que enamorarse nuevamente? ¿Por que su mania de entregar el corazón con tal facilidad?. Solo suspiró e intentó nuevamente descansar, pero no podía quitarla de su mente, inevitablemente la extrañaba. ¿Por que tenia que ser tan bella? ¿Por que aun no podía hallar alguna excusa para convencerse de que ella no tenia lo que él buscaba?. Necesitaba interrogarla, necesitaba descubrir si ella seria la compañera que esperaba. Si solo se engañaba a si mismo, necesitaba saberlo lo antes posible, no podría soportar mucho mas asi, y no se podía permitir a esas alturas perder el foco. Podía aguardar mas años por su compañera anhelada, pero no podía negarle a Dios su vida, Dios se encargaría de dirigirlo hacia su idónea en el momento adecuado, pero aun con esa seguridad, deseaba ya estar listo para que Dios le mostrase a su compañera, con todo su ser, quería que fuese ella.
