- ̗̀✦ ━ ❛¡ ☎️ ! Call me❜┇ft. billdip

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Jueves por la mañana.

A tales horas el más bajo de los gemelos Pines se encontraba organizando sus pertenencias y puliendo su imagen, sin embargo, su labor fue interrumpido por el sonar de su celular. Sin dudas, contestó; podía ser una llamada de vida o muerte.

—Hola, Pines —escuchó desde el otro lado.

«Mierda», lamentó en sus interiores haber respondido la estúpida llamada de esa persona.

—Más vale que sea bueno, Cipher —respondió intentando usar un tono calmado. No estaba preparado para tener una conversación formal, sin golpes de promedio, con el rubio. La verdad, nunca lo estaría.

—Claro que lo será —su respuesta no se hizo tardar.

Dipper notó con rapidez que el contrario parecía emocionado al hablar, tal vez de verdad sí tenía algo bueno que decirle o tal vez sólo sería otra de sus idioteces. «La última opción», razonó.

Hizo un sonido de afirmación, esperando oír la gran noticia que tenía Cipher para él.

—Verás, tu hermana... —comenzó, pero se vió interrumpido por un sonido de fastidio que soltó el que se encontraba al otro lado de la llamada.

—Adiós —masculló sin darle la oportunidad de seguir hablando al otro. Es que Dipper no podía soportar que ese infeliz hablara de su hermana en su presencia. Seguro le vendría con otras de sus bromitas fuera de lugar. ¿Cuándo sería el día en el que Bill Cipher madurara?

Sin querer repetir la última situación vivida con Bill cuando se quedó en su casa, acercó su dedo al botón rojo, el cual acabaría con la llamada, pero no con la persistencia del rubio.

— ¡Espera! —imploró, provocando que el castaño casi tirase el móvil debido al susto. Con otro sonido de afirmación permitió que Bill prosiguiese con su mensaje—. Tu hermana fue y es una persona especial para mí —suspiró y a la vez tragó su orgullo—, y me gustaría tener de tu ayuda para volver a conquistarla.

La risa proveniente de Dipper no se hizo de esperar. Anhelaba poder ver su rostro y mofarse frente a él cuando quisiese. Bill debía de tener un apariencia ridícula en esos momentos.

«Estás dejando de lado tu orgullo por ella», meditó acallando sus risas— Tal vez sí la quieres de verdad —susurró más para sí mismo—. Te ayudaré.

Y volviéndole a prohibir el lujo de responder al rubio, Pines cortó con la llamada. En seguida, pensamientos negativos y desfavorables empezaron a llenar su mente logrando que este comience a sumergirse cada vez más en la duda; sin embargo, prefirió no tomarles importancia y seguir con su rutina, deseando con fervor en sus interiores que por esta vez no se esté volviendo a equivocar con el joven Cipher.