" Quien busca, Encuentra, Aunque no sea lo que esperaba"3ra persona.

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  -¿ Quien está criando a esa niña?- pregunto a Marinette la cual se rió -¿ Viste como me señaló?- ella siguió riendo y chat se aprovechó de su distracción para sentarse a su lado.

  Ella dejó de reír cuando una rosa blanca fue puesta frente a su rostro.

  Ella la tomo como si fuera a romperse entre sus dedos.

-¡ Gracias chat es hermosa!-

-¡ No tanto como tú my lady!- ella se sonrojo y chat se sintió nervioso, este era el momento, debía aprovecharlo pero repentinamente la lengua no le servía. Ladybug lo miraba de soslayo y noto la otra rosa carmesí que llevaba en la otra mano.

  Chatnoir respiró hondo y trato de relajarse, aquello no era para nada fácil.

-...me gustas.- dijo al fin. Ladybug se quedó inmóvil por un momento.

-..yo, yo no creo que actúes cuando te pones la máscara, creo que es una versión que escondes de tu personalidad, me gusta que digas lo que piensas, me gusta que no dejes que nadie te intimide, eres.. una mujer valiente.-

Ladybug sintió que su corazón latía con fuerza y volteó a ver a chatnoir, este miraba al suelo y era imposible leer sus emociones con la máscara puesta.
 
  -..me enamore de ti desde el primer momento que te vi, no soy alguien que hable con las mujeres, pero pensé que con esta máscara podía romper esa barrera, pero luego me di cuenta.. que solo era así cuando estoy contigo.- ladybug junto sus manos en el regazo y siguió escuchando atentamente. Vio como chatnoir abría y cerraba la boca tratando de articular palabras.

  -..tu.. tú me gustas tanto que soy capas de meterme sin invitación a una fiesta sin ser invitado, o subir a una lataforma y bailar sin tropezar.- lady trato de ocultar su sonrisa, pero solo podía morderse los labios para no reír al recordar la locura de el primer día.

  - my lady - dijo este casi en un susurro - yo te entrego mi corazón.- chatnoir levantó su mano y le entrego la rosa, pero cuando volteó a verla, se quedo inmóvil al ver que ella se había quitado la máscara.

  Marinette lo había estado escuchando atentamente, reflexiónaba las palabras y no recordaba haber sentido tanta familiaridad con nadie aparte de el, cuando estaba en su precencia el tiempo volaba tan rápido que deceaba que las horas se detuvieran.
  Cuando entraba en un salón imaginaba que entre ellos se encontraba aquel muchacho con la máscara de gato y no se sorprendió cuando se descubrió esperando que llegara la próxima mascarada.

  Marinette se desató el lazo que sujetaba su máscara y se la quitó antes de que chat voltear a a verla.

  Cuando chat de giro en su dirección este se quedó con la boca abierta y con la rosa en la mano.
  Aquella rosa del rojo intenso, era su corazón.

  La tomó entre sus dedos con la misma delicadeza con la que tomó la anterior. La puso sobre su regazo y extendió sus manos para pasarlas por detrás de la cabeza de chat.

  Chat no se movio ni trato de detenerla, ella desató el listón y retiro la máscara.

  Lo hizo lentamente, como si al hacerlo con brusquedad el tratara de escapar al igual que un animalito.

  Adrien cerró los ojos, sintió que volvía a ser el mismo chico tímido, tenía los nervios a flor de piel.¿ Se molesta? Se pregunto internamente, la inseguridad volvió al quitarse la máscara.

Se dió cuenta que sostenía la respiración cuando la soltó en un profundo suspiro. Se dió valor para abrir los ojos y lo primero que vio no fue la decilusion en los ojos de marinette sino una gran sonrisa en los labios de esta.

¿Quien eres Mi Princesa?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora