Boys love boys and girls {tysh}

38

Después de que Tyler lograra calmar a Josh, ahora se encontraban de nuevo en la cama, el castaño rodeando con cariño el cuerpo del otro mientras este escondía su rostro en el pecho de él.

—No puedes quedarte aquí—habló Josh de la nada.

—¿Qué?—Tyler frunció el ceño.

—Debes irte un tiempo, con tus padres o alguien más—comenzó a hablar muy rápido—Pero no aquí.

—Josh, además de que no tengo a donde ir, ¿crees que huir es una forma de arreglar esto?—dijo en cierto tono que hizo pensar a Josh.

—Entonces no podré volver aquí un tiempo—dijo abrazando un poco más fuerte a Tyler—Y si él llega a regresar, solamente déjale claro que no estoy contigo.

—Tampoco voy a hacer eso—dijo alzando la voz, molesto—Creerá que estas solo, y tal vez ahora quiera hacer algo peor.

—Pero Tyler...

—Encontraremos una solución, ¿está bien?—propuso Tyler con voz suave, llevando una de sus manos al cabello de Josh y acariciandolo delicadamente.

—¿Y lo haremos juntos?—preguntó con voz preocupada.

—Si lo hacemos juntos, aunque algo salga mal, podemos volver a intentarlo—Tyler sonrió.

Josh levantó la cabeza para mirar a Tyler quien pudo notar miedo en su mirada, pero él se encargaría de hacer que su alegre mirada volviera.

-

Durante la noche del mismo día, Tyler había salido a comprar algunos dulces para Josh, recordaba que una vez le contó que cada vez que estaba triste comer algo dulce le hacia sentir mejor. Además necesitaba comida para el gato de Josh e iría de paso.

En cuanto llegó a su departamento, primero sirvió comida en el pequeño plato del gato y después fue a su habitación, frunciendo un poco el ceño al ver a Josh se espaldas recostado boca a bajó sobre la cama.

—¿Qué haces?—preguntó Tyler caminando hacia ahí.

—¡Eras tan lindo!—gritó repentinamente girandose hacia Tyler e hincandose en la cama.

La boca de Tyler se abrió muy grande al ver que Josh sostenía en sus manos un pequeño álbum de fotos que su madre hace tiempo había dejado ahí, tenía fotos de él y sus hermanos de pequeños y de la familia.

—¡¿De dónde sacaste eso?!—Tyler intentó quitárselo pero Josh apartó las manos.

—¡Mírate, Tyler!—dijo con demasiada emoción—Dios, te ves tan tierno.

Josh hizo un puchero haciendo una expresión de ternura y abrazó el álbum cerrando sus ojos.

—¿De dónde lo sacaste?—preguntó Tyler avergonzado.

—Estaba aburrido y lo encontré debajo de tu cama—contestó sin dejar de abrazar el álbum—Eras un bebé tan hermoso—Josh miró a Tyler y este apartó la mirada sonrojandose.

El castaño dejó la bolsa con los dulces sobre la cama y Josh rápidamente la tomó, había todo tipo de dulces para su lindo novio.

—No debiste comprar tantos—dijo Josh quitándole la envoltura a una paleta de cereza.

—Solamente quería que te sintieras mejor—Tyler sonrió entrecerrando sus ojos.

—Hay algo más que me parece realmente dulce—dijo Josh mordiendo sus labios los cuales ya se habían pintado de rojo gracias a la paleta.