Las agujas del reloj no parecian cambiar nunca, y es que la clase de matematicas me tenia aburrida, el profesor se pasaba horas escribiendo en la pizarra, y el calor de la tarde solo aumentaba mis deseos de poder llegar a casa, tirarme en el suelo con el ventilador prendido y la vista pegada a un libro.
-Daysuki
-Dime
-¿A que hora termina esta maldita clase?
-A las...Dentro de unos 15 minutos
-¡Mierda! Dije golpeando la mesa con mi puño derecho
-¿Le pasa algo señorita Akiko? Pregunto el profesor mirandome por arriba de uno de sus hombros
-No Sensei. Dije bajando las manos de la mesa discretamente
-¿Ha copiado ya lo que ando anotando?
-Pues...No...Aun no
-Entonces hagalo ya mismo sino quiere que baje su nota de promedio y conducta para el proximo carne
-Si Sensei. Por respeto todos le deciamos asi, aunque, en algunos casos lo llamabamos por su nombre y apellido: Yuki Forokawa
-Daysuki
-Si...¿Sensei?
-¿Ha copiado usted lo que ando anotando en la pizzarra?
-Si...
-Perfecto, demas esta decir que su promedio y conducta aumentaran en el proximo carne
-¡Eres un...Mentiroso! Dije con voz no tan fuerte a mi amigo que ya empezaba a reirse de la amenaza que el profesor me habia hecho hace unos minutos. ¡Ni siquiera estas copiando!
-¡Shhh! Dijo poniendome un dedo en los labios. Te oira y no me subira la nota
-Aigh...Idiota
-Akiko. Interrumpio el profesor. ¿A quien le acaba de decir idiota?
-¿Yo?...No, a nadie Sensei
-¡Copie!
-De acuerdo
-¡Y no hable mas!
-Si...Sensei
-Profesor ¿Yuki? Dijo la recepcionista golpeando la puerta que ya estaba abierta
-¿Si?
-¿Puedo presentarle alguien?
-Si por supuesto
-Gracias. Dijo sonriendo y entrando con un chico alto, de pelo negro, ojos marrones, piel un poco morena, y mirada que parecia demostrar antisocialismo. Alumnos y profesor, les quiero presentar como ya mencione antes a Hiroki. Todos lo miraron, y ya se podia divisar las tontas reacciones de las chicas, con sus comentarios torpes y un tanto exagerados. Asistio al Liceo de Kyoto y obtuvo muy buenas calificaciones y ahora se mudo solo y a nuesta ciudad para poder cumplir su sueño de poder ser abogado en un futuro remoto. Con un poco de curiosidad lo observe de arriba-abajo, y comprobe que era bastante atractivo.
-Akiko. Dijo Daysuki sacando mi mirada de Hiroki. ¿Sucede algo?
-No...¿porque?
-Tus mejillas estan un poco "rojas"
-¿Que? Dije tocandomelas. ¿Rojas?
-Si
-¿Estas seguro?
-Si mira. Sacando su celular y tras ponerlo frente a mis ojos me di cuenta que Daysuki estaba diciendome la verdad y que no era una de sus bromas molestas
-¿Se nota mucho?
-No...Maso menos
-Uf que alivio. Y es que sabia muy bien que eso solo ocurria si algo que veia o tenia frente a mi me gustaba o me atraia
-Asi que por favor. Dijo la recepcionistas terminando la charla. Tratenlo muy bien. Volvi a mirarlo, y esta vez mi corazon dio un vuelco al notar que su mirada sin siquiera esperarmelo se posaron en mi por un buen momento. Bueno Hiroki haz lo tuyo y sientate donde quieras. Acto seguido se sento a unos centimetros de mi asiento, haciendome sentir un poco incomoda. Hasta pronto profesor Yuki
-Nos estaremos viendo luego señorita recepcionista
-De acuerdo. Cuando esta se marcho, la clase volvio al aburrimiento de hace unos minutos
-Hiroki
-¿Si?
-Empieza a copiar
-De acuerdo. La voz de Hiroki era muy masculina y sexy a la vez. ¿Exactamente que es lo que anduvo copiando?
-Se lo/los contare en cuanto terminen todos de copiar. Trate de concentrarme lo mas que pude, pero era imposible, las manos me temblaban, la letra me salia horrible y el corazón latia desesperado...¿Que me estaba pasando? ¿Porque de repente me sentia una tonta?...Por el rabillo del ojo pude notar que la mirada de Hiroki se poso en mi una vez mas...Y el aroma de su ropa al pasar por mi lado hacia que un calor ardiante me sofocara de a poco...
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In love with a bad boy
RomanceAkiko jamas se habia enamorado de nadie, porque comprendia que el amor era tan solo una perdida de tiempo, rechazando asi los sentimientos que Daysuki sin siquiera saberlo le demostraba con cada gesto amable que sacaba a la luz diariamente. El mundo...