Todo cambiará a partir de ahora

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Narra Yuuri

Recorrimos el resto de la tarde tomados de la mano, vitrineando por Moscú, nunca me había pasado algo así con alguien, he tenido parejas, tanto hombres como mujeres, pero nunca había sentido algo así, creo que realmente estoy babeando por este ruso.

Las horas transcurrían y las ganas de no separarnos aumentaban, pero desgraciadamente tengo práctica a las 5 y no puedo faltar por nada del mundo, Minako me colgaría. Me quedaban 45 minutos para ir a buscar mis cosas y dirigirme al estudio si quería llegar a la hora.

— Tengo práctica a las 5 Vitya, ¿Me acompañas a buscar mis cosas?

— Por supuesto, te acompaño a donde sea, y contaré cada segundo hasta tu regreso — soltó dramáticamente.

— Agh, no seas mamón — la verdad no me importaba que fuera romántico y meloso, pero cuando lo es, es el momento perfecto para molestarlo.

— ¿Por qué matas mi romanticismo? — solo pude reír y encogerme de hombros — ¡Hablo en serio!

— Bueno, bueno, yo contaré cada segundo restante para poder volver a tus brazos — coloqué la mano en la frente dejándome caer un poco, con un exagerado dramatismo — ¿Así está mejor?

— Te odio — murmuró colocando su palma en mi rostro, cubriéndolo casi completamente, empujándolo lejos de él. Agarré su mano y dejé un beso en ella.

— Yo te amo — solté con una confiada sonrisa, se sonrojó y alejó su mano de mis labios — Yioooo te amoooo — canturreé sin ningún tipo de ritmo bailoteando a su alrededor — Mucho, muchito, demasiado~ — antes de seguir dando piruetas en su perímetro me aprisionó en sus brazos besando mi sien muchas veces.

— Entendí el mensaje — dijo al dar el último mimo a rostro — Vamos, no quiero que llegues tarde — entrelazó ambas manos apoyando su frente en la mía. Asentí y nos fuimos devuelta al campus.

 Asentí y nos fuimos devuelta al campus

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Narra Viktor.

Dejé a mi retoño fuera de su estudio de balé, el día de hoy fue perfecto en todos los sentidos, Yuuri que feliz me haces. Cada vez que me dices "te amo" todo mi mundo da vueltas, cada vez que sujetas mi mano, o dejas un beso en mi mejilla, quedo en las nubes y me preocupa tener algún ataque al corazón.

Cambio de CuerpoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora