February // one-shots de NCT

It's showtime! (KunWin)

"¡Señores y señoras, niñas y niños! ¿Están listos para presenciar el espectáculo de circo más impresionante que se haya visto jamás?"

El grito se escucha fuerte y claro desde los camarines. Qian Kun, sentado en uno de los banquillos, inspira hondo e intenta mantener la calma mientras se observa por el espejo que tiene al frente. Los demás, caóticos, como siempre sucede los minutos anteriores al inicio de una función, corren de un lado a otro. No gritan, solo murmullan, pero es como si se estuvieran vociferando debido a la desesperación previa para que todo salga perfecto.

Arregla el corbatín que tiene sobre el cuello, y se sonríe a sí mismo. O, al menos lo intenta.

Porque falla.

"Quisiera comenzar con el espectáculo que ha asombrado a millones; lo que sus ojos verán será magia traída desde los confines de los lugares más espectaculares posibles". Traga saliva, y aguanta una risa nerviosa. El maestro de ceremonias, Lee TaeYong, siempre sabe qué decir para mantener la expectación alta por parte del público, compuesto por familias de clase media, curiosos solteros, e incluso una que otra persona de importancia. "No creerán lo que este joven mago hará frente a ustedes, ¡él es alguien de otro mundo!"

—Ja, buena suerte, extraterrestre —sonríe a quien le da un pequeño golpe juguetón en el hombro: no es nadie más que Johnny, el payaso central de la comedia del tercer acto.

—Gracias, "Sonrisitas" —responde, llamándole por el cariñoso apodo que el mismo público le ha otorgado tras cientos de shows llenos de carcajadas. Le ve alejarse del espejo, y reunirse con el grupo de los demás payasos suplentes.

Se acomoda la chistera por sobre el cabello, dejando un pequeño flequillo pegado a su frente, el que sobresale bajo el ala del sombrero. Pese a que sigue arreglándose, sus ojos se mantienen fijos en otro lugar: en un punto que el espejo refleja.

—Kun, arréglate el sombrero, está torcido —le insta Johnny con un codazo en las costillas. Ni siquiera le ha visto acercarse. Luego, su rostro pintarrajeado de blanco y rojo se acerca a su oído y escucha un susurro—. ¿Embobado todavía con "Goma de Mascar"?

Con él, no vale mentir. Asiente. Sus palmadas en la espalda le remecen por completo; pese a ser inofensivo en el espectáculo, Johnny es poseedor de una fuerza capaz de competir con el hombre forzudo del sexto número.

—Lamentable, pero sí—-confirma, y vuelve a mirar el mismo punto en el espejo.

Goma de Mascar. Apodo extravagante, infantil, sencillo. Todas, características del chico que realiza su sagrado ritual de estiramientos, y que lleva su cuerpo a límites más allá de los demás mortales.

La estrella principal, Dong SiCheng.

El protagonista, también, de los latidos que se asientan en su corazón cada vez que lo encuentra en su campo de visión.

Pero entonces, la voz profunda de TaeYong le recuerda en dónde está y rompe su pequeña burbuja.

"El gran, el único..."

—¡Kun, buena suerte!

Justo cuando está a punto de irse, voltea. SiCheng le sonríe y agita su mano.

Se queda estático.

"¡Qian Kun, el mago excepcional!"

—¡Vamos, sal a escena! —Johnny prácticamente le empuja hacia el escenario, y pese a que las luces del lugar le enceguecen, encuentra pronto el punto de equilibrio y se presenta con una elegante reverencia.