______ Y Trunks Briefs | 6

.05.

—¿A dónde vas, _____? — preguntó Bulma, llamando la atención de todos los que estaban ahí.

—A ninguna parte en especial. — se puso la chaqueta. — Les encargo a Saya. Está en mi habitación; luego bajará a comer algo. Que no sean dulces, pero tampoco cosas saladas. Trunks, Mirai está bien, solo tiene un dolor de cabeza. A las 19:30, dale un calmante, es de color azul. Solo una pastilla, aunque te diga lo contrario. — Se puso una bufanda alrededor de su cuello. — Te lo encargo. — Sonrió en la dirección de su familia y luego se dirigió a la puerta. — Nos vemos. Llevaré mi celular por si algo pasa. — Cerró la puerta y se fue.

—... — La familia miró el lugar por el que se fue, aún con gran sorpresa. — ¿Qué...?

—¿Esa fue ______? — La cara de Bra era épica, no salía de su impresión, igual que su padre y sus hermanos. Bulma rió y se fue nuevamente a la mesa en donde estaba trabajando, al mismo tiempo en el que Saya entraba a la sala de estar a saltos.

—¡Hola! — Saludó casi gritando. — Tengo hambre, ¿qué estás comiendo, Abuelo? — Corrió hasta la mesa y se arrodilló sobre la silla enfrente del pelinegro.

Vegeta se tensó ante el apodo, pero luego sonrió. — Aún nada, la comida no está lista todavía. ¿Qué quieres comer?

—.. Mm... — Pensó. — ¡Hamburguesas!

—Bien, quizá otro día.

—¿¡Eh!? ¿¡Entonces por qué me preguntaste!? — Bufó.

—.. Porque sí.

La pequeña bufó otra vez y se sonrojó al escuchar la risa de sus tíos. — ¡Mejor que esto, ¿dónde está mi Mamá? — Se giró sobre sus rodillas arriba de la silla para poder ver a los hermanos de su madre.

—Acaba de salir. — Dijo Mirai Trunks. — Nos pidió cuidarte.

—Ah, ¿otra vez salió? ¿A dónde fue?

—"A ninguna parte en especial". — Dijo Vegeta, frunciendo el ceño. — Ella dijo.

—Mng... — Gruñó la pequeña, y luego hizo pucheros. — Ni siquiera me invitó. ¡No me dijo nada!

—No seas llorona. — Trunks se levantó del sofá.

—Cállate tú. — Le sacó la lengua. — ¡Mamá salió! — Se tapó el rostro, lloriqueando.

⋯ • ⋯

—¿Eres capaz de "calmar" tus ataques de ansiedad? — La psicóloga miró a la pelinegra, mientras acomodaba sus refinados lentes con una mano, mientras que con la otra sostenía una tabla, en la cual tenía anotado todo lo que ______ le decía.

—A veces... — Suspiró, agarrándose el pelo.

—¿Y qué pasa cuando eso no ocurre?

—Golpeo todo a mi alrededor, pierdo el aire y suelto llorar. Suelo calmarme cuando escucho a Saya o a Fuun.

—¿Que no era que nadie más sabía de esto? — Alzó una ceja.

—Solo Fuun... Saya cree que me enojo.

La mujer suspiró y se quitó los lentes. — ______... Conozco bastante bien a tu familia. ¡Tu madre es mi mejor amiga, es como una hermana! Sé todo lo que has pasado en estos años y quiero ayudarte. Quizá cuando estuviste en San Francisco tuviste una atención más... detallada, ¿me equivoco?

—... No.

—¿En qué consistían?

—Pastillas.

La mayor suspiró. — Pues aquí no haré nada de eso. — Habló con tono serio, a lo que ______ levantó la mirada.

—¿Entonces qué? ¿Electrochoques? — Se burló.

—No. — Negó, aterrada de solo pensarlo. — No voy a darte de tomar pastillas, ni nada de ese tipo. Quiero que hablemos. Las cosas se solucionan así, hablando. No cortándose, no con pastillas, no con drogas, ni electrochoques... Las cosas se solucionan hablando, y lo más probable que con alguna que otra lágrima de por medio. Aunque si es necesario, las pastillas pueden entrar, pero no creo que sea posible.

_____ sonrió. — Entonces ayúdame a curarme y salir de este maldito infierno, ¿sí?

⋯ • ⋯

—¿Cómo te sientes? — El peli-lila entró en la habitación, con una leve sonrisa en el rostro, mirando a su hermana mayor.

Ella no se dio cuenta de su presencia, puesto que tan solo miraba por la ventana, con los ojos cristalizados.

—¿Mirai? — Se acercó.

—¿Oh? — Giró su rostro hasta donde la miraban. — Perdón, no te había visto, Trunks.

—Preguntaba que cómo te sentías. ¿Ya te encuentras mejor?

—Un poco de dolor de cabeza, pero nada más.

—Ya veo. — Asintió. — ¿Qué te da ______ cuando te duele la cabeza?

—No sé, es una pastilla azul, creo. — Se tapó el rostro, mientras cerraba los ojos y luego suspiraba.

—Am... — El menor comenzó a buscarlo por la estantería que tenía ______ en la habitación. — Aquí está. — Tomó una caja pequeña, que adentro tenía pastillas, con la descripción que ______ y Mirai le dieron.

—Sí, esas. — La mayor movió la mano, en gesto de decir 'sí', aunque la verdad es que no sabía de qué hablaba, solo estaba concentrada en mirar por la ventana sin mera preocupación.

—Ten. — Su hermano menor le entregó una cápsula azul y un vaso con agua. Mirai los tomó sin decir nada, devolvió el vaso y luego volvió a mirar por la ventana.

El peli-lila dejó el vaso sobre la mesa y se acercó a su hermana nuevamente. — ¿Ocurre algo, hermana?

—Oh,¿qué? — Lo miró. — Perdón, pero no te escuché. ¿Qué decías?

—Si acaso te ocurre algo, has estado muy extraña estos días. ¿Es por lo del sello?

Ella arrugó las cejas y luego suspiró, rascándose la sien. — Sinceramente sí. Hay algo que me inquieta.

—Dime. Puedes confiar en mí.

—Lo sé, pero. — Suspiró. — No sé cómo decir este tipo de cosas.

—Mm. — Pensó. — Hay veces que lo mejor es ser sincero, solo hay que decirlo.

La mayor lo miró con duda, pero luego asintió. — Si lo que Fuun y ______ dijeron es verdad, entonces es probable que en los últimos diez años yo haya estado o todo el tiempo o la mayoría de este poseída. Lo que significa que hice cosas sin darme cuenta o por obligación, me estaba preguntando si acaso había matado a alguien durante este tiempo. — Soltó cada palabra con sumo desprecio y asco de sí misma, como si estuviera hablando de la peor persona del mundo, pero en realidad estaba hablando de ella misma, lo cual la hacía estremecer.

Trunks observó el rostro afligido de su hermana mayor y suspiró. — Verás, sé que hay muchas probabilidades de que eso haya sucedido, pero no tortures tu mente pensando en que hiciste algo malo, hasta ese... punto.

Mirai no se quedó muy conforme, pero aún así asintió. — Sé que quizá me resistí, pero no puedo asegurar que no hice nada malo porque lo creo totalmente.

—¿Por qué lo crees?

—______ me dijo algo al respecto, me preguntó si acaso recordaba algo de lo que pasó esa noche en su habitación, le dije todo, pero la verdad es que creo que sí le hice algo a alguien.

—¿Por qué aseguras eso?

—Porque siento la conciencia pesada, muy pesada, pero no logro recordar por qué.