Capítulo 8

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Baekhyun nunca se imaginó que esto sucedería. Si alguien, durante los primeros días desde que Yixing llego, le hubiera dicho que ambos lograrían convivir en un mismo espacio sin tanta tensión de por medio, probablemente se habría reído en la cara de esa persona. De alguna manera, habían logrado liberar dicha tensión o estrés mientras soltaban puños y sudaban. Tampoco es como si le hubiera prometido que entrenaría con él todos los días, pues porque en realidad no siempre podía. Sin embargo, al caer la noche y al darse cuenta de que estaba prácticamente libre de sus obligaciones, sus pies se movían solos a la sala de entrenamientos. No lo pensaba mucho cuando mandaba a Jongdae a dormir y al parecer el castaño tampoco le daba muchas vueltas al asunto ya que simplemente no negaba su compañía. Fue algo así como un acuerdo mutuo y silencioso.

Si Baekhyun ingresaba en la sala, entonces entrenaban. Pero si el pelinegro no podía hacerlo, Yixing entrenaba solo cuando Jongdae estaba libre para vigilarlo y si no, volvía a su habitación.

Los primeros días no existía platica de por medio más que simples observaciones que Baekhyun hacía, pero conforme fueron avanzando, pequeñas y sencillas platicas salían a flote. Nada demasiado importante, cosas banales. Y cada vez que el silencio caía entre ellos cuando lo llevaba de vuelta a su habitación, no era incómodo. Era más bien algo así como un silencio tranquilo y pacífico. Sin querer aceptarlo, lo que empezó siendo un simple rato para superarse mutuamente, término siendo un agradable momento que ambos disfrutaban.

Esa mañana, Chanyeol logra despertarlo de su ensimismamiento al golpear la puerta de su oficina.

—¿Qué sucede?—pregunta, aclarándose la garganta y paseando la mirada sobre su escritorio, fingiendo hacer cualquier cosa.

—¿No comes?

—Claro. En un momento los alcanzo. —asegura, apilando unos cuantos papeles.

—¿Todo bien, Baekhyun? Te noto distraído. —el pelinegro no encuentra ni una gota de preocupación en su tono de voz y lo confirma al ver la sonrisa arrogante en sus labios. Esta burlándose de él.

—Cierra la boca. Mejor preocúpate por darme buenas noticias en la próxima reunión. Asegúrate de decirle lo mismo a Sehun y Jongin.

El alto chasquea la lengua y asiente, marchándose después. Baekhyun suelta un resoplido y avienta los papeles sobre la mesa. Tiene intención de levantarse pero alcanza a observar un pequeño control en una de las esquinas. Todavía recuerda que Jongin se lo había dado alegando haberlo encontrado en el suelo de una de las salas. Lo toma entre sus dedos y se asegura de guardarlo en el cajón derecho. No lo ha usado desde aquella vez y probablemente no lo usara pronto.

Unos quince minutos más tarde se encuentra en el comedor comiendo de su almuerzo lentamente. Jongdae está a su lado y no deja de parlotear acerca de algo a lo que no le pone mucha atención a diferencia de Minseok, quien parece demasiado interesado en las tonterías que salen de su boca. Pasea su mirada por el lugar y frunce el ceño cuando observa a Luhan en otra de las mesas charlando animadamente con Sehun.

—Jongdae. —lo llama y el nombrado se gira inmediatamente, levantando sus cejas en espera—. ¿Dónde está Yixing?

—En su habitación.

—¿No debería estar con Luhan ya?

—Oh claro. —dice, por fin entendiendo lo que trata de preguntarle exactamente—. Luhan me dijo que no había tareas que hacer hoy y que mejor lo dejara descansar en su habitación. Es la primera vez que toma un descanso desde que comenzó. Pero no te preocupes, ya le han llevado el desayuno.

Baekhyun se queda con las palabras en la boca y continúa comiendo. Al frente, Chanyeol se da cuenta pero decide quedarse callado también, sabiendo muy bien que algo está molestándolo.

The Comfort Zone - BaekLayWhere stories live. Discover now