Sherlock 2 : Las Historias De Amelie.

Episodio 3, parte 3

John durmió con la incognita. Sherlock no habló sobre lo que había descubierto. Lo que era raro porque a él siempre le gustaba presumir lo que deducía. Fue sino hasta después del desayuno cuando se digno a responderle la pregunta.
-Lo que yo descubrí- Dijo lentamente- es que, si, en efecto son gemelos. Pero no fue un crimen hacia ellos porque si. El señor Ellton dirige una compañía de seguros, la cual le ha fallado a muchos. Lo que creo yo, es que lo mataron por eso. Venganza.
-Dijiste "lo". Son dos chicos, Sherlock.
-Si, es lo que dije. -Los Watson lo miraban extrañados pero Amelie entendía a lo que se refería. Luego agregó hablando muy rápido.- Bien. August Ellton si murió, no obstante, fue el segundo cadáver que hayamos. El primero, según lo que me mandó mi hermano, se llama Zack. El asesino se equivocó de niño.
-Hermoso...- Suspiró Rosie.
-Vaya... Si que hablas rápido- Rió Amelie.

Cuando las niñas volvieron de la escuela,  Sherlock y John seguían investigando en la sala de estar, por lo cual ellas subieron a su cuarto.
-¿Al final te enfrentaste con Michael?
-Yo no...- El celular la interrumpió. Era un mensaje de BlackWhite.
" Esto se va a volver muy divertido ¿no es así? Les tengo un nuevo caso. ¡El más difícil de todos! Los demás los resolvieron con mucha rapidez. Pero no se preocupen, voy a dejar de ser tan considerado. Les voy a dar esta vez cinco días para resolverlo. ¿Cuál misterio? Simple.
¿¿¿QUIÉN SOY YO???
~BlackWhite"
Ambas respiraron agitadas. Rosie se moría del miedo. Amelie se decía a si misma que podia hacerlo.
Si hubiese sido tan fácil, lo hubieran averiguado antes. Esto seria complicado. Muy complicado...

Sherlock pasaba de la computadora de John a la de él. Buscaba en Internet, en archivos. John se refregaba los ojos.
-Entonces, quieres decir que hay 14 personas las cuales tendrian motivo. ¿Qué vas a hacer?¿Entrevistarlas a todas?
-Nop. Solo a Cameron Dugffer. Tiene antecedetes. Supuestamente decían era culpable de un crimen. Pero no tenían evidencia de que lo fuera.
-Entonces...
-Con él voy a hablar.

Amelie y Rosie mintieron que tenían mucha tarea, por lo que los dos amigos salieron a cazar criminales como en los viejos tiempos.
Cuando llegaron a la puerta, Sherlock golpeó y dijo en tono autoritario:
-Señor Dugffer, abra la puerta.
Como no pasó nada, él forzó la puerta. La casa estsba vacía. Se había ido hace rato. Unas dos horas pensó Sherlock. Observó todo el lugar.
-Debe estar en la estación de Paddington.
Corrieron hacia allí. No pideron ayuda a Lestrade, como siempre, Sherlock queria hacerlo solo.
Entre la multitud, el detective pudo reconocer al hombre que buscaban. Corrió hacia él. Dugffer se percató y corrió también. Solo que Sherlock sabía perfectamente como alcanzarlo.
Luego de una carrera épica, Sherlock le saltó en sima, deteniendolo.

Amelie y Rosie pensaban. ¿Quién podría ser BlackWhite? ¿Alguien conocido?¿Un extraño? ¿Algún cliente enfadado de sus padres? Tenían que averiguarlo y pronto.
-Sabía que sería más complicado. -Suspiró Rosie vencida.- No lo vamos a lograr más. Ni siquiera se por donde empezar.
-Ya intenamos triangular la ubicación, pero fue de distintos lugares. El teléfono es diferente todos los días.- Rosie se quedó pensativa.
-Me pregunto...

Lestrade obligó a Sherlock que llevara a su sopechoso a Scotland Yard. Lo metieron en una sala de interrogatorios.
- Así no es como trabajo yo. Odio hacer interrogatorios ahi.- Exclamó Sherlock.
- Así es como trabajo yo. Vos tomaste las riendas del caso, ahora es mi turno.- A regañadientes, Sherlock entró en la sala.
Estuvieron media hora con él. Luego de mucha presión, a pesar que no tuvieran evidencias el hombre confesó.
- ¡Ese bastardo de Ellton! Cuándo volví del jucio, mi esposa había perdido la casa porque el seguro no cubría que yo estuviera en la cárcel.
-Listo. Confesó. Adiós.- Se apuró Sherlock.
-No, no, no. No he terminado. Yo si maté a los dos. Me equivoqué con el primero. Pero no fue mi idea. Alguien me contrató.
- ¿Quien?- Preguntó el detective preocupado.
-Moriarty. - Dijo el hombre. Sherlock se preocupo pero luego se calmó al ver que Dugffer se reía a carcajadas. Abandonó la habitación. - ¡Moriría antes de decirte quien fue! ¡ Y me importa una mierda si no me ayuda con la Fiscalía!

Sherlock y John llegaron a casa felices. Bueno, Sherlock en parte feliz parte molesto ya que no tendría nada más que resolver.
-¿Cómo estuvo su tarea?- Dijo de manera sarcastica sentandose en su sillón.
- Er... ¿Bien? Un minuto... ¿Cómo sabías que no nos quedamos por la tarea?
-No te quedarias sin resolver un caso por esa estupidez. Seguramemte se quedaron charlando. De chicos o algo así que les importe a las adolescentes.
-¿Chicos? - Se molestó John.
-Por favor, papá. No seas celoso.

La mañana siguiente en el colegio, Rosie se pasó los recreos leyendo un libro que la tenia muy enganchada. Amelie conversó con Thomas. Lo quería mucho. No como novio, pero si era un gran amigo. "Pobre" pensó Amelie" Es obvio que gusta de mi" Ella no se creía muy linda, al contrario. De igual manera, se sintió bien que alguien gustara de ella.

A la hora de la salida, el curso de Amelie se atrasó. Ella se preocupó de que Rosie esté sola afuera. Resolver asesinatos te deja un poco traumada.
Cuando salió se dirigió hacia donde estaba su hermana. Desde lejos, vio como ese tal Michael la molestaba. Se acercó a ellos lenta pero decididamente.
- ¿Tienen algún problema con mi hermana?
-¿Hermana? ¿ Otra chica detective?
- Si. Pero esta no tiene piedad.
-¿Piedad? ¿Qué? ¿Me vas a golpear?
-No. - Dijo con una sorisa malefica- te voy a deducir.- El chico estalló a carcajadas.- Reite si queres. Pero yo soy la que va reir al último cuando le cuente a todos quien es la chica que te gusta y como la tratas para que te preste un poco de atención,  que sos un brabucon porque tus padres son muy malos contigo, lo inseguro que sos de vos mismo, sobre tu problema intestinal y lo que haces casi todos los días frente a tu computadora.
El rostro de Michael Rogers se tornó blanco. Ellas se retiraron triunfalmente.
-¡Eres como tu padre!- Dijo Rogers mientras se alejaban.- ¡Un maldito psicopata!
Amelie se detuvo en seco. Sacó una pistola de su bolsillo y lo apuntó. Actuó como si estuviera horrorisada por lo que había dicho.
- ¡Es un sociopata altamente funcional! Y más te vale que nos dejes a mí y a mi hermana tranquilas. O te vuelo esa horrible cara que tenes.
Michael y sus amigos salieron corriendo asustados, no sin antes gritarle"¡Loca!".
Ambas se fueron con una gran sonrisa de victoria.
- ¿De dónde sacaste esa arma?- Le preguntó Rosie
-De un lugar místico.
Amelie extendió el arma al cielo y tiró del gatillo. De él salió una bandera que decía "BANG"
Las dos rieron y volvieron a Baker Street haciendo bromas.