Capítulo 1: Presentaciones

66 8 7
                                    

¡Bam, cruch! Y brinca exaltado de entre sus sabanas un joven aun soñoliento y con un corazón acelerado ¡BAM cruch!, ¡BAM chruch!, ¡BAM cruch!.

- ¿Qué demonios... es?- ¡BAM cruch!,  ¡BAM cruch!- ¡Ah cierto!- exclamo Alec hablando solo, en este momento recordó que ese día iban a reparar el techo, se concentro en calmarse un poco estaba algo alterado al ser despertado así, el chico se tumba nuevamente sobre su cama, calma su respiración y comienza a organizar ideas de lo ocurrido parece que fueran a derribar el techo sobre su cabeza en cualquier momento en lugar de repararlo, por supuesto no lo harán no es la primera vez que realizan estos trabajos. Se comienza a acurrucar en su cama y... 

- Primer día clases- se disparo a ver la hora y ¡Dios! si que era tarde va rápidamente a bañarse y al salir comienza a vestirse frente al espejo como de costumbre, este día le dedica un poco más de tiempo a los detalles en el espejo le emociona mucho reencontrarse con sus amigos y siempre le gusta dar buena impresión después de tanto tiempo sin verlos y es que vamos seguro que han cambiado algo en estas vacaciones.  

Al voltear ve la cama desordenada en medio de la habitación blanca, abre las persianas que ocupan todo la pared a su derecha esta es una gran ventana, entra inmediatamente una enorme cantidad de luz natural que lo ilumina todo, ordena rápidamente su cama  y en eso resuena la voz de su hermana- es tarde, ¡sal ya! tenemos que irnos- Alec se da una última mirada al espejo y va apresurado en busca su morral lo toma y sale rápidamente del cuarto y baja a la sala. 

Allí esta mi hermana perfectamente arreglada de pies a cabeza, me encanta verla así pero no me anima mucho su cara, al verme reacciona de inmediato.

- es tarde nos vemos en el auto ve a despedirte, si tardas te vas corriendo a clases. 

ella hablaba en serio, corrí a la cocina me despedí de mis a padres y salí a toda velocidad hacia el auto que ya estaba en la calle esperando por mi. 

 - Casi te dejo- dijo en tono burlón mi hermana.

- ¡Oh! vamos sabes que no es cierto apenas y esperaste, además tu amor por mi no te lo fuera permitido- dije mientras subía al auto y cerraba la puerta

- ¿apuestas?- pregunto desafiante.

- no, no déjalo así- y escapo una gran carcajada de ella yo la acompañe, estaba seguro que iba a detener la camioneta y me iba a hacer caminar si no lo hacia y no tenía tiempo para caminar al colegio a pesar que ya estábamos cerca. 

Mientras reían la música paro y comienzan a dar un boletín informativo, "alistamiento de homo-potens", un silencio cortante se apodero de la cabina.

Mi hermana lo mas veloz que pudo intento cambiar la radio y finalmente termino apagando la misma, yo hago como si ignorara la situación pues yo también soy un homo-potens, es increíble que hayan comenzado justo hoy con el alistamiento seguro habrá revueltas.

- Alec yo...-dijo ella

- no olvídalo no quiero hablar de esto hoy- respondió Alec sin muchos ánimos, su hermana se quedo pensando un momento y comprendió- de acuerdo, esta atento hoy vuelvo por ti al terminar clases- ella también esperaba que hubiera revueltas  al igual que Alec- al salir del auto este solo asintió con la cabeza. 

Alec no podía parar de pensar en lo que se venia encima con el alistamiento los días siguientes iban a ser terribles, este trata de librar su cabeza de todos estos pensamientos y se apresura a reunirse con sus amigos en el campo oeste, que es un gran espacio abierto y arbolado ubicado al oeste de los edificios del instituto educativo ; había grupos de estudiantes por aquí y allá  y Alec buscaba animado por todo el parque hasta que a lo lejos diviso un resplandor rojo muy intenso, no había dudas esa cabellera era inigualable allí estaba después de tantas semanas por fin vería a su amiga de nuevo. 

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 05, 2018 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Homo PotensDonde viven las historias. Descúbrelo ahora