Un amor indeleble. SHIKATEMA fanfic

Capítulo 12

Shikamaru y Temari se encontraban en una vereda de la pequeña ciudad de Konoha, estában escondidos por supuesto, habían dejado la casa de Sasuke hace media hora y decidieron esconderse entre veredas para no ser vistos por nadie. Shikamaru tenía mucho tiempo en silencio desde que descubrió que aquella chica era su compañera de trabajo sólo pensaba y pensaba que podría hacer para attaparle y descubrir si en realidad era la culpable de todo.
-¿qué harás ahora?- Temari le pregunto curiosa. Ella debía de llegar a casa antes de las 9 tenía tiempo de continuar con el eso si ningún policía o lo que sea la había visto en las cámaras ahora estaban en su casa interrogado a sus padres.

-Tu deberías regresar a casa, yo iré a ver a mamá. - El muchacho miro hacia atrás cuando escucho uno pasos, se acercaban unas personas familiares para Temari, de seguro eran conocidos de Shikamaru. El muchacho abrazo a Temari y la arincono contra el muro de la vereda. - Lo siento. - dijo antes de acerca su cara al cuello de la chica. Ella sintió su respiración caliente y la recorrió un escalofrío, las personas pasaron susurrando en dirección a ellos y desaparecieron en uno segundos al cruzar la esquina.

-Buena manera de distraer a las personas...- Temari se safo algo nerviosa y Shikamaru bajo un poco más su gorra, le miro y sonrió.

- Hueles bien - Temari apartó su mirada y el Nara comenzó a reír. - Si alguien va a tu casa, sólo dile que saliste primero y que no sabes nada al respecto.

- Bien. - Temari continuó caminando hasta cruzar la esquina de la vereda. - Aunque ruego no hayan llegado tan rápido a casa, mi madre... estara furiosa.

- Estoy seguro de que Ino se habrá inventado algo... - El chico detuvo a Temari y bajo sus lentes para mirarla a los ojos. - Aquí nos separamos, ve a casa y yo trataré de comunicarme con mamá, apenas llegue a algun lugar te buscaré o llamare... necesitaré ayuda en el plan, pero antes quiero saber de mamá.

Temari comenzó a reír a carcajadas. - Todo se escucha tan misterioso, viniendo de ti... eres muy cobarde. ¿dónde vas a quedarte? La casa de tu ti está repleta de vigilancia...

-No lo sé... buscaré, quizás en algún hotel. - Shikamaru la miro irritado. - No empieces ¿Si? No pienso regresar a la cárcel en donde estoy y no puedo ir a donde mi tía porque es otra cárcel. Yo puedo arreglarmelas, tengo dinero.

- Oh, disculpame millonario. - Temari se cruzó de brazos y sonrió. - Mira, puedes quedarte en casa, papá y mamá no tienen porque enterarse y Kankuro es quien revisa las cámaras así que p-

- no. - Shikamaru sacó un billete de su bolsillo y lo extendió hacia Temari. - Ten, ve a casa. Cuidate mucho.

Aunque no pudo evitar sonrojarse si trato de mantener su facción ruda, ¿a dónde demonios iría Shikamaru? No podía simplemente quedar de en un hotel cualquiera corriendo el riesgo de quedarse en la calle o ser encontrado, aunque todo era una tontería desde el punto de cualquiera el podría resultar herido o asesinado, así que era una cuestión de seguridad, preferiría por supuesto que permneciera con Ino ya que contaba con la seguridad suficiente, pero, el había decido que no, y el estado de depresión en el que se encontraba estando allí, sin comunicación ni nada le hacía sentir lastima por el, Y Temari pensó que su casa luego del incidente estaba más segura, así que ¿Porque No? Estaría igual de encerrado, escondido, pero seguramente no vigilado y en Suna, otra ciudad.

- No quiero tu dinero, me iré caminando corriendo el riesgo de ser violada o peor, asesinada. - Temari se cruzó de brazos y se dio la vuelta comenzó a caminar rápidamente, podía escuchar los pasos de Shikamaru a sus espaldas.

- Temari por favor. - tomo el hombro de la chica y la hizo detenerse.- Ve a casa.

Unos susurros vinieron desde la otra acera, no pudo ver bien de quien se trataba pero se sintió incómoda. Se giró para mirarle pero el estaba muy ocupado ocultandose tras un poste, que estaba justo al frente de ellos. Temari suspiro, iba a ser imposible que este chico hubiese escondido en un hotel en paz, iba a pensar que cualquiera estaba persiguiendole.