Pitufos.

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Recorrer los alrededores con Yoongi era entretenido, interesante y sumamente educativo.

Ese hyung sabía todo, no importaba las trivialidades que se le preguntaba, él te las contestaba y de no entenderlas, tenía toda la paciencia del mundo para explicarte todo nuevamente, tomando ejemplos bobos y aplicandolos para que al final todo resultará increíblemente fácil y entretenido de saber.

Los menores que lo siguieron se encontraban profundamente admirados del hermano de sus líderes.

Era como una enciclopedia humana, pero mejor. Ojalá hubieran tenido algún profesor o maestro que les enseñara de esta manera. Práctico, sencillo y fácil de captar.

-Wow! Eres impresionante, hyung- Jungkook lo miraba con admiración- ahora entiendo de quien ha heredado Namjoon hyung su inteligencia.

Yoongi rió. Estos niños eran realmente adorables.

-Me hubiera encantado tener un profesor que me explicara las cosas de esta manera- Yugyeom, quien había adelantado unos pasos se giró a verlo- Por lo menos no me hubiera dormido en las clases.

Un comentario malicioso de Kook hacia el que recientemente había hablado, dio inicio a una juguetona pelea. Adelantándose unos cuantos pasos, entre burlas y pequeños empujones.

En ese momento recordó al otro chico que los había acompañado, y que hasta ese momento se había mantenido en silencio.

Miro hacia la derecha, encontrándonos justo a su lado, casi rozando hombros.

No entendió el porque eso lo hizo ruborizarse de repente. Cómo si en ese momento se volviera consciente del agradable calor que desprendía el cuerpo de Taehyung a su lado.

Sacudió su cabeza. El no se podía permitir eso. No podía ser tan egoísta....

De repente todo se sintió más frío, su pecho se apretó luego de mandarle un pinchazo de dolor...

Oh no...Ahora No.

Repentinamente cansado, paró su andar. Dos ojos evaluadores se giraron hacia él...

-Hyung, ¿Tienes frío?- si, un poco, pero en realidad no era sólo eso- tienes los labios azulados.

Yoongi cerró sus ojos un segundo. Sus manos comenzando a temblar.

-Llama a mis hermanos, por favor- murmuró entrecortadamente- diles que vengan a buscarnos rápido.

Frunciendo el entrecejo, Tae acató la petición. Miró hacia donde estaban los maknaes quienes en ese instante se giraron para ver cuanto se habían adelantado.

-Vamos a sentarnos.- eso sonó como una súplica.

Tres pasos fueron necesarios para que Tae se diera cuenta de la inestabilidad de su mayor. Sujeto la delgada cintura y lo ayudó a llegar a la banca. El cuerpo de Yoongi temblaba, y Tae casi aseguraba que no era solamente por el frío.

Los ojos de Yoongi se veían cansados, estaba a punto de dormirse. En un movimiento rápido hizo lo que Jaebum siempre hacia. Lo colocó sobre sus piernas y lo apretó contra su cuerpo. Fue correspondido languidamente. Algo no estaba bien.

-¿Qué sucede?- Jungkook también había visto la inestabilidad, la palidez y los labios azulados.

Yugyeom miraba con preocupación el pequeño cuerpo del hermano de su líder que estaba prácticamente escondido entre los brazos de Taehyung.

Tae, negó con un movimiento de cabeza a la pregunta de Kook y apretó un poco más su agarre en el cuerpo encima suyo.

Algo no estaba bien. Nada bien.

***

Bambam y Jimin seguían rogando por sus vidas a los pitufos azulados frente a ellos.

Youngjae se había escapado. Maldito. Dejo a sus menores a su suerte, eso no era ser un buen hyung.

-No los escucho rogar por sus vidas~- Dios. El líder de los de GOT7 era más aterrador de lo que parecía.

Silencio.

¿Cómo se supone que tendrían que rogar? Ellos no habían hecho nada...Bueno...se rieron. Pero luego, todo el color azul a prueba de agua que tenían sus líderes era totalmente culpa del hermoso hermanito de porcelana de estos. Ese hyung era un pequeño precioso demonio.

-Nosotros no fuimos!- era como la cuarta vez que lo decía. Pero era muy poco creíble teniendo en cuenta que los habían atrapado con las manos llenas de los tarritos de pintura y pinceles usados- Por favor, les juro que nosotros no tuvimos nada que ver.

-Es verdad- Bambam apoyó a Jimin- Fue Yoongi hyung y...- era momento de desquitarse con el que los había abandonado- Youngjae hyung. Si, el también fue partícipe- maldad reflejaba su sonrisa. Ahí tiene, por mal hyung.

-No mientas, pequeño montruo!!- Youngjae salió de donde quiera que estuviera escondido dentro de la cocina. Tenía que autodefenderse.

La mirada de los dos líderes era desconfiada. Bien. Sabían que su hermano era un pequeño diablillo y que probablemente el había sido la mente maestra de todo esto....pero, ¿Cómo fueron a parar las pinturas y los pinceles en manos de estos otros chicos?.

Youngjae se acercó a pasó acelerado. Necesitaba limpiar su nombre.

-Yoongi hyung nos engatusó con cara tierna y ojitos adormilados, antes de llevarse a Gyeommie, Kookie y Tae a dar una vuelta- respiro profundo, estaba hablando tan rápido que ni tiempo de respirar le daba- Nos dijo que le sostuviéramos estás pinturas y pinceles- Dijo señalando la mesa en donde estaban los objetos incriminatorios- y se fue, cerrando la puerta lentamente, regalándonos una sonrisa malévola. Debimos darnos cuenta antes de sus malvadas intenciones.- luego, más para si mismo que para el resto, agregó- Malvado diablillo tierno de sonrisa de ángel.

Sip. Eso era su hermano. Nunca mejor descrito.

- ¿Y porque estos dos te acusan de cómplice?- Jaebum tomó las riendas del interrogatorio al ver que su hermano se iba un poco más atrás a atender una llamada entrante.

- Por ser un hyung abandónico- Jiminnie se paró de repente mirando con reproche al que acababa de dar la explicación.

- El nos dejó a la deriva para salvar su pellejo.-agregó Bammie replicando la expresión del anterior- Mal hyung!

El líder de GOT7 abrió la boca para hacer otra pregunta, pero la voz alterada de Namjoon a su espalda llamó su atención.

- Ya estamos saliendo para ahí. Mantenganlo calentito.

- ¿Qué pasó?.

- Yoongi se debilitó. Dice Jungkook, que está pálido y con los labios azulados- explicó por arriba mientras se colocaba el abrigo y los zapatos a las corridas.

Fue inmediatamente imitado por JB. Dejando olvidados a los que habían estado interrogado y olvidándose también de que iban a salir pareciendo un par de pitufos azules.

Continuará...

No Dejes De LatirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora