Dieciséis

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                Regrabaciones 1
        Vancouver – octubre 2014

Darla

Extrañar se ha convertido en una fase de mi vida por la cual me juré no transitar, soy una mujer tan descomplicada que para mí los sentimientos se han convertido en una barrera de protección. Ya sabes… es como si pusieras una pared frente a ti que evite que todo aquello que pueda ocasionarte daño o dolor te atraviese. Sí, podrían pensar que por ser una chica de signo libra, soy puro amor, cariñosa y dulce hasta más no poder, y puede que lo sea, pero soy yo la que controla la situación, no dejo que nadie me controle, sé muy bien lo que es que una mujer sufra las tempestades más atroces de la vida, sería una estúpida si permito que un huracán me arrolle y no deje nada de mí. Bueno no soy para nada de esas mujeres que se dejan envolver tan fácil.
“Error” me estoy planteando no ser ya una mujer que no se deje envolver.
Bueno cuando la vida te pone de tú a tú con la persona que puede hacer contigo lo que quiera, así te plantees una y otra vez poner miles de barreras, es imposible no ser atravesado ¡Hey! Pero si es aquí donde llega la fuerza descomunal y derriba tu pared de protección. Jaison Donell ha hecho que mi teoría, la que tanto me ha funcionado, se disipe, se esfume, se ahogue, se entierre en las profundidades más inimaginables. Le quiero, le deseo, le anhelo, le extraño y ya
por si fuera poco le “amo”. No hay que ser un genio para saber que cuando hay “amor” todo en ti se paraliza, un mensaje, una llamada, el tenerlo frente a ti te
corta la respiración hasta verte casi asfixiado, tus piernas se debilitan, tu corazón quiere salirse de tu pecho y tratas por todos los medios que absolutamente nadie que este alrededor se dé cuenta de lo que estás transmitiendo. Créanme es la jodida cosa más difícil que me ha pasado en la vida, y doy gracias a Dios por hacerme una buena actriz, si no todos notarían lo que mi alma quiere gritar al mundo.
Lo tengo frente a mí, después de un tiempo considerable, lo tengo a unos pasos, es él en carne y hueso mirándome como si yo fuera la vida misma, como si yo fuera quien le da oxígeno para sobrevivir, me observa como si quisiera gritarle al mundo lo que su cuerpo está implorando. Sé que lo frenan las personas que nos rodean, no estoy tan contenta con él, pero después del tiempo que ha pasado lo que más deseo es poderlo besar, que me atrape en sus brazos y me bese hasta que no podamos más. No nos hemos tocado y ya mi piel arde por él y sé lo que pasa por su cabeza. Es increíble como Jaison y yo nos entendemos y hablamos con una simple mirada. Tenemos una señal de afecto “cierro mis ojos y juego con mi nariz” Sí, es tonto, pero es nuestra seña de cariño, sabe que cuando lo hago es porque estamos bien.
Debemos regrabar una escena de la película en Vancouver. Es muy sencilla, nunca creí que se grabaría precisa esta escena, pero somos los protagonistas, debemos dejarnos llevar. Nos ubican en un auto a Jaison y a mí, y Samantha viaja en otro con algunos camarógrafos. Agradezco este espacio a solas con él, podremos hablar de todo lo que nos ha estado pasando. Bueno cuando digo hablar no es preciso lo que pasó. Jaison tenía tanta hambre de mí, bueno de mis labios, no dejó de besarme, morderme, chuparme, hasta ya ni sentirlos, nos separamos ya que era necesario hacerlo, si no podríamos desnudarnos en pleno automóvil. Jaison estaba completamente duro y yo muy húmeda son combinaciones que no podemos pasar por alto. Lo distancié de mí para conversar.
—No sabes cómo te he extrañado Darla. Mi vida sin ti en Londres es un infierno. No duermo bien pensando en ti, dándole vueltas a todo esto.
— ¿En qué has pensado? Yo no sé qué pensar Jaison. Pasa el tiempo y no nos vemos, no puedo decir que no te extraño, sería una gran mentira.
—Pienso en todo, en que deseo compartir más contigo, escaparme contigo, vivir nuestro amor, pero luego Alice se sube por las paredes y me vuelve totalmente loco. ¿Cómo dejar a Dulce María sola? Al menos no puedo con una mujer que es tan inestable. Darla… he visto que disfrutas tanto con tus amigos,
tu familia, con el imbécil de Michael Hitt, me estremezco sólo de pensar que yo no significo nada para ti, que no te afecta todo esto como me afecta a mí.
—Comprendo lo de “Alice” sí, es un ser completamente inestable y por lo que me has contado desde que fueron novios, ella ha sido una persona difícil desde hace tiempo. Sí, lo mejor es que cuides de tu hija. Jaison debo hacer mi
vida ¿Qué pretendes? Que me quede llorando por los rincones, dándome golpes de pecho porque el hombre que quiero y deseo junto a mí está del otro lado del mundo con su esposa. No mi amor no pienso dejar que esto pueda conmigo, es fuerte para mí Jaison, lo es, pero yo debo controlar esto, no dejar que me controle, si no terminaré sin fuerzas, ni ánimos de nada.
—No sabes lo que me haces, eres realmente importante para mí Darla, eres más de lo que siento que merezco, eres más de lo que pensé que llegaría a mi vida. Necesito estar contigo, lo deseo, pero sabemos muy bien que ahora es imposible. Amor vendrán tiempos mejores, lo merecemos, este amor merece culminar con un final feliz.
—Así es… digamos que entre “vaya viniendo, vamos viendo”. Ahora vamos a dedicarnos al trabajo. Me besa y salimos del auto. ¡Manos a la obra!
Grabar en Vancouver es tedioso e incómodo, hace calor lo cual es extraño, Jaison y yo estamos desconcentrados, nos equivocamos por varias ocasiones y no podemos parar de reír. Algunas veces el viento mueve mi flequillo y mi frente queda al descubierto, Marcela me peina, me retoca, pero el viento está en mi contra. Jaison me arregla el flequillo y nos observamos, es tan perfecto, me
encanta que cuide de mí; aunque a veces lo detesto cuando se burla de mi frente, sé que la tengo enorme, pero no tengo la culpa de heredar la frente de mi padre Dominick. Bueno dicen que las personas de frente amplia son muy inteligentes ¡Y claro que lo soy!
Al final del día todo salió de maravilla y Jaison y yo en ocasiones nos perdimos con ayuda de Samantha y nos dimos algunos besitos deliciosos, bueno besitos no, unos besotes que nos dejaron sin respiración.

Destinos Cruzados La realidad supera la ficciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora