Un sentimiento retenido por años
deseando salir, volar, sentir,
disfrutar del viento y ser libre,
libre de alcanzarte.
Deseos de encontrar la llave
que va a desocupar mi mente
de buscar a alguien para ello,
de buscarte en otros.
Un te quiero a conservar.
Un te quiero a atesorar.
Un te quiero en una pantalla.
Un te quiero que no supe apreciar.
Pero, siempre hay un pero...
La locura me consumirá
pretendiendo no sentir nada más,
a demasiadas cosas llamo destino
y tú las llamas casualidad.
La incertidumbre me llevaba
y ahora sé que siento,
te quiero pero,
olvidé que mi alma lloraba.
El te quiero tardó en llegar,
nevó y, el aire cambió
como los sentimientos al recordar,
tu amor partió pero es tarde,
un te quiero en mí ya nació.
ESTÁS LEYENDO
Un Café Poético
PoetryRecopilación de poemas y cartas que voy escribiendo. #52 poesía (11.03.2018)
