Scandal

Te amaré hasta el fin de la galaxia

Ellos son hechos el uno para el otro.

Aquella frase abrumaba en la mente de Chloé, no aceptaba que su amor no iba a pertenecer a Adrien, al final, solo era de Marinette.

— Deberías de dejar de llorar, tu bien sabes que no puedes quebrantar el lazo de los une. — comento de manera intranquila, aquel ser con apariencia de abeja.

— Pollen, yo lo amo, no puedo dejar en pensar en él. — contesto entre pequeños ahogos.

Su Kwami entendía su dolor, pero no podía hacer nada, romper la unión de los Miraculous principales sería lo peor. Realmente le era difícil entender a los humanos en cuestiones del amor.

— Hay muchos chicos en este mundo, no te deberías de estancar en alguien que ya tiene su verdadero... — Pollen paró de hablar cuando escuchó unos susurros.

— Todo mundo puede ser feliz contigo — aquello sorprendió al Kwami. ¿Ser feliz con todo mundo, a qué se refería?

— ¿Chloé? — la joven se secó sus lágrimas y miro asía arriba. Ella, la hija del alcalde de París no se iba a rendir por una pequeñez. No ahora que sabe la identidad de Chat.

— Me valdrá un comino, yo Chloé Bourgeois seré la única que le corresponderá a Adrien. —

[...]

En la entrada del colegio se encontraba la rubia, esperando la llegada de su objetivo.

— Últimamente te has comportado rara, deberías relajarte un poco. — la voz de Sabrina la distrajo por un momento, aunque no le dio importancia, simplemente soltó un bufido.

— Estoy bien, no te tienes por que alterar. —

— ¿No me tengo que alterar? Pero con esa ropa ni pareces ser tú. —

Ella rodó los ojos y volvió a poner la vista en la entrada, viendo así al joven rubio. — ¡Adrikins! —

El muchacho al oír la molesta voz de Chloé suspiró pesadamente y miro a una chica sin tanto maquillaje y con ropa más cómoda.

— Vaya, te ves... — realmente le sorprendió ver así a su amiga de la infancia.

— ¿Hermosa?, lo se. — pero con esa actitud supo que en realidad no cambió nada.

— Bueno... — quería contar aquella conversación y la única escapatoria que se le ocurrió fue esta. — Oh, creo que Marinette me esta hablando, nos vemos Chloé. — en realidad le purgaba que el rubio se escapara de sus encantos.

— Adiós — dijo ella haciendo una sonrisa forzada. En serio que aveces le disgustaba que Adrien pusiera de excusa que vería a la azabache.

— ¿Otra vez se alejó de ti? Pero si estás preciosa. — alagó Sabrina, mientras se acercaba a la joven rubia.

— No se alejó, solo quería ir al baño, eso es todo. — intentó sonar despreocupada, pero la pelirroja no era tonta, se escuchaba bastante forzado.

— ¿En serio? — alzó una ceja y parecía estar intrigada.

— No, en realidad uso la misma tonta excusa, ¿acaso no cree en mi? — reprocho Chloé, inflando las mejillas de manera infantil.