Crecer no es fácil y mucho menos si tienes una familia defectuosa.
Camilo es un adolescente de 17 años y como todos los jóvenes de su edad cree que sus problemas van a matarlo cuando este dormido en su habitación.
Hace ya varios años que comenzó a encerrarse en el cuarto de miedos e inseguridades hasta podría decirse que es su lugar favorito ya que solo sale de ahí unas cuantas horas para ir a la escuela misma que considera un lugar muy hipócrita donde tiene que sonreír y ser un payaso parlante para poder llevarse bien con los compañeros que solo hablan de redes sociales, chismes irrelevantes, sexo y embarazos no tan deseados. La mamá de este chico apenas y aparece en su vida, ella es una mujer consumida por los años de fiesta en casas ajenas y cenizas de cigarrillo tiradas en los baños públicos de cualquier motel, nunca estuvo en los festivales de la escuela y probablemente nunca estará. El padre digamos que es solo una foto guardada en el ropero, aunque puedo decirte que Camilo aun duda que aquel hombre con barba de candado y sonrisa perfecta sea su verdadero padre aunque eso no quita que en las noches donde la soledad ataca el alma y saca las lágrimas que rompen la almohada el abrace esa foto y piense en las cosas que pudieron ser diferentes si al menos su papá hubiese querido conocerlo. Sus sueños los guarda en su cabeza y oculta sus talentos en la habitación de los miedos e inseguridades, el jamás le dirá a su madre que sueña con ser famoso así como tampoco que todas las noches antes de dormir piensa en ella y ruega por su bienestar porque a pesar de todos los fallos que han tenido la ama porque no es un mal agradecido y reconoce que aunque no siempre está para abrazarlo y secar sus lágrimas nunca le ha faltado nada si de recursos hablamos, no se ha ido a la cama con hambre y nunca tuvo que robar para tener algo que necesitaba así como también reconoce que la vida de su madre no es fácil y ha tenido que luchar mucho para poder sobrevivir estando sola. A pesar de tener algunos amigos en la escuela, mismos que obtuvo gracias a su inteligencia para matemáticas Camilo se sentía muy solo, la falta de cariño que había tenido durante su corta vida lo lastimo de una manera terrible y lo ahogaba en la depresión, odiaba las noches porque era cuando más solo se sentía, se perdía en sus rodillas abrazadoras y como única compañía tenía una melodía que rompe el corazón, consideraba que era bueno sumergirse en el mar de las lágrimas algunas veces para limpiar sus ojos y de paso su alma.