1- El Primer hogar

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          Tommy nació junto a sus 4 hermanos en una  casa de familia, no eran cachorros de raza, por lo que tal vez a ojos de sus dueños, no eran "Lindos", los primeros meses vivieron en el patio de aquella casa, donde había muy poco espacio para jugar, de igual modo se veían muy felices, un día uno de los hermanos de Tommy se enfermó, y murió tres días después, los dueños de la casa tomaron la decisión de regalar a los cachorros y así fue, el padre de la familia les compro a cada uno una placa con forma de hueso y allí grabo sus nombres, y los colocó en los collares de los cachorros, así se verían un poco mas atractivos, casi todos fueron adoptados las semanas siguientes, solo quedo uno, el pequeño Tommy, tal vez nadie lo llevaba porque tenia los dientes torcidos, o porque aullaba un poco extraño (a veces hacia sonidos como los de un gato), el caso es que nadie lo quería adoptar, Tommy continuo viviendo allí  por algunos meses, como el sitio era muy pequeño, Tommy se aburría mucho, sus dueños nunca le regalaron juguetes, además de que nunca le permitían entrar a la casa, La familia acostumbro a los niños a golpearlo como si fuera algo gracioso, eran malas personas, muchas veces cuando se reunían en el patio los fines de semana para compartir en familia, amarraban al perro y se reían mientras sus hijos tomaban palos para golpear al cachorrito, obvio, los niños eran muy pequeños, dos gemelos de 4 años de edad, pero de todas maneras Tommy se asustaba, la madre de Tommy podía correr libre por la casa, por lo visto todos le tenían cariño, ¿por qué a el no? ...los dientes torcidos supongo.

          Un día, 6 meses después del nacimiento de Tommy, la Familia salió en su camioneta, llevaron a la madre de Tommy, pero el pobre cachorro quedo encerrado en el patio, jugaba solo como casi siempre, hasta que se cansó y se quedo dormido en una cajita de cartón que le servia como techo para protegerse de la lluvia, donde tenia un trapo viejo que le servia de cama, pero un ruido alertó al perro, levanto sus orejitas y salio corriendo, la puerta del patio estaba abierta, por primera vez iba a poder entrar a la casa, pero al entrar vio a un hombre muy extraño que no era de la familia, estaba buscando dinero y algunas pertenencias de valor de la familia, el Cachorro comenzó a ladrar un poco asustado, aunque mayor fue el susto del ladrón que sin pensarlo, salió corriendo sin haberse llevado nada, no lo asusto el simple ladrido de Tommy, sino que pensó que tal vez alertaría a alguien y sería descubierto. Tommy se quedo dentro de la casa, era un mundo nuevo para el, realmente no entendía nada de lo que pasaba, era solo un cachorro, entonces empezó a jugar con los zapatos de uno de los gemelos, tanto que quedaron inutilizables, sintió un poco de hambre y se dirigió a donde su instinto y su olfato lo guiaron, La Cocina, un olor lo atraía desde la mesa del comedor, y al parecer esos sonidos raros que Tommy hacía al bostezar o al aullar, sonidos que eran parecidos a los de un gato, tenían una razón de ser, el pequeño cachorro subió a una de las sillas, y luego vio fácil subirse a la mesa de un salto, ahí estaba en una taza, la comida que los gemelos habían dejado, el problema es que estaba protegida con un plástico en la parte de arriba, Tommy no sabía que era eso, solo intentaba comer, y empujó la taza hasta que esta cayó al piso y se partió, Tommy percibió que el olor a comida se hacia mas fuerte, y se lanzo desde la mesa golpeándose contra el piso, pero al instante se levanto y moviendo su cola se dirigió rápidamente hacia su preciado botín, ¡comió hasta saciarse! era tal la inocencia del cachorro, que se puso a jugar con lo poco que quedaba de comida, movía la cola y ladraba, y se dejaba caer al suelo con la panza hacia arriba mientras le gruñía a la comida, cuando se cansó se dirigió a la sala, donde encontró una superficie muy suave y cómoda para dormir, los muebles, allí se acostó y durmió feliz y satisfecho por el banquete que se había dado.

          Cuando la familia llegó a casa, muy grande fue el disgusto al encontrar semejante desastre (hecho en su mayoría por el ladrón) el cachorro levanto las orejas y comenzó a mover la cola en señal de alegría, después de todo era su familia, aunque ser encontrado durmiendo en los muebles no le ayudaba en mucho para probar su inocencia, el padre de la familia tomo un palo y lo golpeó tanto que una de sus patas le quedo muy mal herida, lo amarró al patio y lo dejó ahí toda la noche, la lluvia caía muy fuerte, el pobre cachorro estaba muy lejos de su cajita, la que lo protegía de la lluvia, su pata le dolía, aunque su panza estaba llena, eso lo reconfortaba, durmió bajo la lluvia, y cuando salió el sol, el padre de la familia lo alzo de la pata que tenía herida y lo montó en el maletero de la camioneta, el cachorro chillaba del dolor, aunque al llegar al maletero se tranquilizó, tal vez dentro de su pequeña cabeza el pensaba que irían de paseo, no lo se.

          El padre abrió el maletero y alzó al perro de una pata, lo dejó allí y se marcho, Tommy corrió detrás de la camioneta por varias cuadras, pero fue imposible alcanzarlo, no sabía donde estaba, había mucha gente extraña, el se asusto y corrió hasta un callejón, allí habían otros perros que de inmediato comenzaron a ladrar, Tommy se asusto y agacho sus orejas, uno de los perros lo mordió pero el pequeño Tommy no se defendió. la tarde transcurrió y Tommy vagaba por las calles, sintió el olor a comida y se dejó guiar, camino hasta las afueras de un restaurante, el solo sabía que tenía hambre y que la puerta estaba abierta, entonces entró y de inmediato un hombre que estaba parado cerca de la puerta le dio una patada y al perro no le quedó mas opción que salir corriendo, caminaba un poco extraño por el dolor en su pata, el hambre crecía a cada paso y aun estaba asustado ya que no conocía ese lugar, se quedó cerca del restaurante, hasta que tarde en la noche, un hombre sacó algunas sobras de comida en una bolsa y las lanzó a un contenedor de basura. Tommy tal vez hacía sonidos extraños como de gato, pero no podía saltar tan alto, se quedó entonces en el piso moviendo su cola tratando de subir, pero se le hizo imposible, pasaban las horas y el cachorro aun no se rendía, pero ya estaba cansado, los gatos aprovecharon de comer lo que pudieron, hasta que llegó un mendigo, este agarro la bolsa y saco de ahí toda la comida que pudo rescatar, se sentó a comer en el callejón y el cachorro se sentó frente a el esperando a que le lanzara al menos un hueso, el mendigo devoraba mostrando que llevaba días sin comer, entonces levanto la mirada y vio al pequeño cachorro, le dejó un poco de comida en un recipiente desechable que estaba en la bolsa de basura, y se quedo a vigilar que ningún otro perro le quitara la comida a Tommy, y cuando este termino de comer el mendigo se compadeció y le dejó un poco mas de comida antes de irse, Tommy comió y al levantar la vista para buscar a aquel hombre, este ya no estaba, Tommy se quedó durmiendo en el callejón, esperando a que saliera el hombre a dejar la comida de nuevo en la basura, en la madrugada volvió a llover, el cachorro logro esconderse bajo unas cajas que lo protegían un poco, y cuando despertó de nuevo, estaba todo empapado por la lluvia, la caja se había dañado mientras el dormía, el cachorro empezó a jugar con los restos de la caja, y cuando se aburrió se fue a caminar en busca de mas comida, tratando de no alejarse mucho del callejón, buscaba en basureros pequeños, y a veces tenía suerte de encontrar un poco de comida, Tommy jugaba con todo lo que encontraba, después de todo era un cachorro, pero los otros perros eran agresivos con el cuando se acercaba, y muchas veces lo mordían, Tommy siempre volvía al callejón, aunque casi nunca podía alcanzar la comida, ya que los gatos podían saltar hasta ahí arriba y el no, aunque a veces el hombre que siempre lanzaba la bolsa de desperdicios desde lejos, fallaba y la bolsa caía al piso, entonces Tommy con sus patas rompía la bolsa y devoraba todo lo que podía, así pasaron varias semanas, el cachorro comía lo poco que encontraba, y su única fuente de agua eran los charcos que se hacían por la lluvia, siempre estaba jugando solo y trataba de evitar el contacto con las personas por miedo a que lo golpearan.

          Pasaron 3 meses desde que el cachorro fue abandonado en las calles, y seguía viviendo en el callejón, una noche salió un hombre del restaurante y dejo un recipiente con comida en el suelo, el cachorro corrió moviendo la cola pero antes de dar el primer bocado un perro de gran tamaño lo atacó, lo mordió tan fuerte y tantas veces que Tommy sangro de una de sus patas delanteras y de una de sus orejas, el enorme perro devoró toda la comida y se quedo allí, Tommy se escondió asustado, pasaron las horas y cuando salió el sol, el otro perro estaba tirado en el suelo con espuma en su boca, Tommy se fue a caminar en busca de comida, y por todas las calles cercanas, habían cachorros en el mismo estado, alguien los había envenenado, algunas personas miraban a los perros con cara de tristeza e indignación, un grupo de personas hablaban acerca de la clase de persona que uno debía ser para cometer la atrocidad, estaban desayunando afuera de un Café, y a pesar de sus palabras hermosas acerca de la protección de los animales, ninguno fue capaz de bajar la mirada y darle un poco de comida al pequeño Tommy, Vaya que el mundo esta lleno de hipocresía.

AbandonadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora