Y era como un sueño...

Introducción

Lo recuerdo como si lo hubiera tenido al frente: ojos azules como el océano lleno de vida, cabelleras rubias, tez blanca con mejillas rojizas después de haberle tirado una cachetada...
-Entonces, si tienes novio ¿por qué me mirabas siempre o tratabas de enamorarme?-replicó molesto.
Lo miré y comenzó a acercarse y yo di el paso final... nos besamos. Disfruté tanto ese beso, sentía que me iba a desvanecer, había olvidado las palabras que le dije hace rato y sale un balbuceo de mis labios...
-Bas... Bast... ¡Basta!-empujándolo con mis dos brazos- esto no está bien, si no quieres meterte en problemas, es mejor que te vayas.
Observé sus ojos llenos de vida que se iban apagando lentamente, volviéndose rojizos por retener la tristeza.
-No sabes cómo me estoy sintiendo ahora, pero...- dio dos pasos, beso en la frente y se marchó...