Justin respiró con fuerza, inhalando todo el jodido aire que era capaz de tomar. Mierda, ese había sido un buen golpe. Lo habían tackleado, la adrenalina estaba en su máximo punto, pero eso no significa que no sintiera como sus pulmones trabajaban y como una pequeña sonrisa irrumpía en sus labios.
El juego estaba siendo difícil pero eso solo lo alentaba y lo hacía poner de muy buen humor, ¿Quien era él para no satisfacerse por esa descarga de adrenalina que le provocaba entrar al campo?
Era algo alucinante y él estaba ganando y lo sabía. Justin disfrutaba el juego, lo gozaba, aprendía de él y lo amaba, poniendo plena dedicación pues sabía que de eso dependía que las universidades pusieran un ojo en él. Y justamente por eso daba lo mejor de sí mismo cuando jugaba.
Tenía la suerte de que todo se daba bien en cada juego, y que su equipo lo respaldaba totalmente. Justin sabía que no era nada sin ellos, y también sabía que la combinación que juntos hacían era brutal.
Y los jodidos gritos que todo el estadio estaba dando en ese momento por el touchdown que acababan de anotar, confirmaba lo buenos que eran.
Justin gritó en victoria y gritó más fuerte cuando sus compañeros lo bombardearon. Sonrió mientras el estadio coreaba el nombre de su equipo, satisfacción recorriéndolo. Eso era todo y él no podía pedirle nada más a la vida.
❝Hey, Bieber.
¿Hay alguien así de bueno como tú? No lo creo y disfruté cada minuto del juego y sí, lo vi, te vi. Amo verte, ya lo sabes de sobra. Me pone húmeda ver el entusiasmo con el que juegas. Estoy húmeda ahora, y mis pezones duelen, bebé.
Te quiero tanto, fue desesperante ver como salías del estadio mientras estaba haciendo un desastre mis bragas y temblaba al hacerte esta nota. Estoy tan empapada ahora, que se que si estuvieras aquí podrías deslizar tu mano dentro de mis shorts y encontrarme lista para ti❞.
¿Justin había dicho que no podía pedirle algo más a la vida? Estaba equivocado, joder. Él la estaba pidiendo y deseando a ella. Y que lo asparan si la pequeña nota en sus manos no estaba causando un desastre en sus pantalones.
Ella era astuta y él sabía que debía estar disfrutando imaginarlo ponerse de esa manera. Lo que él se preguntaba era sí ella en verdad estaba así de mal por él. Y quería saberlo, quería preguntarle de cerca, quería que ella le respondiera. Fue en ese momento cuando se le ocurrió que no era tan mala idea preguntarle.
Justin con rapidez alcanzó del interior de su casillero uno de los boligrafos que se encontraba ahí, arrancando una porción de papel de uno de sus cuadernos. Un gruñido escapó de sus labios cuando su piel hormigueó de emoción. Sus bolas dolían, y estaba tan jodidamente excitado mientras escribía que tuvo que morderse los labios con fuerza y apoyar la parte inferior de su cuerpo contra los casilleros, gruñendo por la presión en su polla.
Justin respiró con más lentitud y descartó el boligrafo, leyendo lentamente lo que acababa de poner, imaginando que debía estar rojo por el calor que estaba sintiendo, cerró sus ojos por un momento y lamió sus labios. Enderezandose de golpe y cerrando la puerta de su locker, doblando el papel y dejándolo descansar en la pequeña ranura de su casillero, apenas perceptible, pero teniendo la seguridad de que ella lo notaría, pues por ahí mismo ella deslizaba las notas que le daba a él.
No pudo evitar sonreír divertido y emocionado. Él ya estaba dispuesto al imaginar como reaccionaría ella al leer aquello:
❝Hey, nena.
¿Eres una pequeña niña sucia no es así? Escribiendo eso para mí y poniéndome tan mal. Estoy duro al imaginarte húmeda para mí y quiero verte para comprobarlo.
Dime ahora, ¿Qué harás al respecto, cariño?❞.
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Hey, Bieber
Fanfiction❝Cariño, puedes tener todo lo que quieras... Pero eso no significa que todas pueden dártelo❞. [+18] justin bieber Todos los derechos reservados.