"Ese momento en el que sabes que no eres una triste historia. Estás vivo. Y ves las luces en los edificios y todo lo que te hace preguntarte y estás escuchando esa canción con la gente qué más quieres... Y en ese momento juro... Somos infinitos." -The perks of being a wallflower.
Esta tarde el cielo empezó a ocultar el sol y su resplandeciente brillo y en cambio, puso unas enormes nubes que cargaban muchas gotas de lluvia. La tarde no era tenebrosa, ni mucho menos triste, era algo así como tranquila. Pero esa tranquilidad no era empleada para todos, solo para algunos ciudadanos de la hermosa ciudad de Londres, aunque una pequeña persona (así es como le decían todas las personas, sin antes haber hablado con ella) hubiera dado todo absolutamente todo por disfrutar esa tarde porque para ser sincera ella amaba esas tardes poder abrir su ventana y que las pequeñas gotas de agua tocaran sus mejillas o cualquier otro lugar, solo disfrutar su hermoso rose con ella. Esta tarde era muy diferente a cualquier tarde que ella hubiera disfrutado, ese día perdió alguien muy importante para ella, su hermana, esa persona se fue la dejo sola, a ella y a su hermano, los abandono y ahora ¿Quién los iba a escuchar? ¿Quién va a estar para ellos? ¿Cómo podrían estar un minuto sin discutir?, literalmente ¿Cómo podrían vivir sin ella?, en pocas palabras ella fue su Ángel como siempre ella decía, “La vida es muy corta así que tómala y aprovéchala” esa frase siempre la tenía en mente y de igual forma la aplicaba. La tarde ya estaba cayendo y la pequeña Lia no quería separarse de la tumba de su hermana, tal vez se hacía daño recordando todo lo que paso con su ella pero era inevitable para ella, cada vez que subía la mirada creía verla ahí sonriéndole, no lo podía evitar cada lagrima era un recuerdo que tenía que borrar para no herirse. En cambio su hermano Michael no quería salir de su habitación para nada, no comía, no dormía y no hablaba con absolutamente nadie. Lia sabía perfectamente que le lastimaba demasiado que su hermana ya no estuviera con él, ellos eran realmente unidos siempre se tenían el uno con el otro. Pero ahora Lia pensaba que Michael tal vez se estaba culpando de la muerte de su hermana, la razón era porque él podría haber buscado una solución para que su hermana no muriera muy pronto, o que tal vez (claro con mucha suerte) evitara su muerte! Como todos querían.
-Vamos Lia tenemos que irnos, ya no podemos estar aquí…
-Claro que si, a ellos no les importa, ni siquiera notan mi presencia, Vamos Tyler! Déjame quedar más tiempo, no quiero irme Mizy está aquí!
-Lia por favor, vámonos te vas a enfermar, piensa lo que diría Mizy te hubiera dicho lo mismo que te estoy diciendo así que por favor haz lo correcto y vámonos, tus papas están muy preocupados por ti y prometí cuidarte.
-Es que Tyler todo ese lugar me recuerda a ella! Como pretendes que viviré feliz sabiendo que ella ya no está a mi lado, y también estoy perdiendo a Michael no sale para nada, ni siquiera quiere hablar con nadie y Allison no está en su casa para que pueda hablar con ella, sabes que ella era como mi segunda hermana porque como Mizy me sabían escuchar. Estoy sola en esto y prefiero estar junto con Mizy porque estando aquí es como si sintiera su presencia y enserio la necesito Tyler…
-Lo se Lia pero no estás sola en esto y lo sabes perfectamente me tienes a mí y jamás te dejare sola así que por favor vámonos de aquí, si quieres podemos ir Regent´s Park te despejaras un poco… ¿Aceptas?-este estiro la mano para que Lia pudiera tomarla.
-Ok está bien Tyler…-Lia extendió su mano para que pudiera juntarla con la de Tyler.
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