Cuatro: Los mejores amigos nunca fallan.

24 4 2
                                    

Luke.P.O.V:


Las horas habían pasado como segundos, exagero pero lo sentí así. Estuve en este lugar por mucho tiempo, no sentí las horas golpearme, pero si sentí el dolor y el miedo. Era demasiado lo que estoy viviendo, necesitaba a alguien que me ayude, no podía hacerlo todo ¡Mi mama ya no esta! y la necesito mas que a nada. ¿Que puedo hacer? ¿Fingir como lo hacía siempre? ¿Pretender ser feliz?

No, tenía que hacer el mayor esfuerzo por mi pequeña Litha, ya que soy lo único que tiene. También temía por Nathaniel, lo que acaba de pasar fue una lección ¿Verdad? querer a tu hermano mas que a nada, pero el no es mi hermano, el no tiene casi sangre mía ¿Porque tendría que quererlo si fue un fruto de la infidelidad de mi padre a mi madre?. La vida me castiga y a todos los que amo.

Sentí una puerta abrirse fuerte, como de un empujón y pensé lo peor: La estaban llevando a Litha en una camilla inconsciente. Pero gracias a dios que no, la puerta que se abrió fue la de la sala de espera y una persona que mas necesitaba en este momento apareció tras ella, Carrie, mi hermana del alma miro a todos lados buscándome, y cuando me vio me levante. Ella corrió hacía mi y me atrapo en un gran abrazo. No pude evitar llorar, era un idiota, pero ella era la única que me hacía sentir bien en este momento. 

—No puedo...— susurre.

—Si podrás, no es grabe y aparte no estas solo— se separo de mi y señalo a la puerta donde estaban todos mis amigos, sonreí. Ellos lo eran todo para mi.

—¡Abrazo de osoooo!— Grito Cameron y todos corrieron a abrazarnos, mi corazón estallo de alegría al saber que los tontos de mis mejores amigos nunca se van a ir de mi lado, a pesar de todo lo que vivimos. En lo de mi madre, en las situaciones en la que no tenía dinero cuando mi papa desaparecía, en todo

—Ven Sky, sumate— hablo Tixon. Me había olvidado que Sky se había quedado conmigo toda la noche.

—No, yo.. ya debo irme— Tomo su bolso y se fue, desapareció por los pasillos.

—¿Que le ocurre?— preguntó Cameron.

—¿Quien es ella?— preguntó Carrie.

—Una compañera, me la crucé hoy temprano y quiso quedarse conmigo— respondí— Espérenme, ahora vuelvo.

Y corrí hacía ella, que no se encontraba lejos.

Esperen ¿Escucharon lo que dije? Jamas corrí tras una chica y menos una desconocida. La alcance finalmente y la detuve.

—¡Oye!— dijo ella.

—¿Que ocurre? ¿Porque te vas?

—Es que, debo irme, es que ya es tarde y mi madre debe estar esperándome... es que mi nana preparo sopa y no quiero.... es que debo irme, adiós— hizo unos pasos pero tome su brazo— ¿Puedes soltarme? Tengo que irme.

—No sabes mentir, ni el mínimo porcentaje.

—No miento, yo no soy así.

—Entonces trata de decirme algo, que sea creíble.

—Claro que no, no mentí así que suéltame— alcé una ceja— ¿No me soltaras cierto?

—No hasta que me crea algo que digas.

Bufó: —Yo... es que... yo.. y... ¡Agh! Yo no pertenezco a ese grupo, yo no soy de allí y nadie quiere que me quede allí ¿Contento?

—No digas eso, nosotros no te excluimos.

—¡Tu si! Siempre lo haz echo, cuando estoy con ustedes eres el que me trata mal, ¿Sabes? Pensé que podría llegar a ser tu amiga, pensé que podría tener amigos. Pero eres un idiota.

Roots: Algunos pueden ser iguales |Pausada|Where stories live. Discover now