Capítulo 1: Mucho gusto

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No puedo explicar lo que sentí en ese momento, solo sé que fue algo que me marcaría por el resto de mi existencia, me haría sentir vivo y muerto a la vez, como si mi corazón dejara de latir por momentos. Fue algo que nunca sabré explicar, aunque lo curioso es que como pasó es lo de menos, sino lo que importó fue en lo que me transformó, como cada vez al terminar un libro recuerdas esas frases que te marcaron y que se quedarán contigo el resto de tu vida y la cambiarán. No puedo explicar lo que fue, pero si lo que me hizo.

Martes, 15 de octubre del 2016, medio día: La vida transcurría a su paso, no era más que el comienzo del mismo martes semanal: Las niñas de al lado maquillándose y hablando de lo que pasaría en su dichoso "evento" como típicas puertas de 15 años al inicio de nuevo semestre. En la banca delantera: el mismo chavo de siempre, hablando con el profesor de la hora correspondiente para no reprobar semestre (que curiosamente está empezando).

Y así cada día de la semana, la misma rutina, las mismas materias, los mismos amigos, lo mismo todo. Parece que te acostumbras a lo cotidiano, ser una persona monótona para seguir el ritmo de la vida, al menos para todos los demás, pero en mi caso no, tan solo buscaba algo que no fuera lo mismo de siempre, algo que me cambiara por completo y conocer otro Angulo de la existencia. Curiosamente, ese mismo martes, entre la fantasía y el aburrimiento entre clases algo pasó, algo inesperado (¡por fin!) cruzó la puerta con inseguridad y la cabeza baja, vestida con un mayón negro, playera con una frase estampada que se leía "All we need is love", botas con diseño de flores y una sudadera azul, pelo largo, ondulado y de color castaño obscuro, un poco gordita, ojos cafés pequeños, nariz pequeña sobre una cara regordeta y con unas mejillas adorables; susurrando al profesor <<¿Puedo pasar?>>.

Ustedes se preguntarán << ¿Qué carajos tiene eso de diferente para ti?>>, aún no llegamos a esa parte. Como les decía: Aquella chica de nombre desconocido aun para mí, se sentó detrás mío, se limitó a abrir su libreta y seguir la clase. No les mentiré, se me hacía difícil no voltear cada 5 minutos para observar su cara, no por morbo ni curiosidad, sino era: Gusto. Era algo que no me había pasado nunca, como si por fin después de tiempo, una persona activara esos pequeños sensores en tu cabeza que te repiten <<obsérvala>>.

La curiosidad era más grande conforme el tiempo pasaba, la chica no ha dicho ni una sola palabra desde que llegó, << ¿Estará nerviosa? >> me pregunté cuando volteé de nuevo a verla. Levantó la mirada, me dirigió la vista y, me sonrió.

Fue tan extraño y bonito a la vez, me sentía como un niño pequeño cuando sus padres lo abrazaban; que raro es, que, con tan solo un gesto sencillo, produzca una sensación inexplicable. Volteé de nuevo y ella seguía mirándome, ahora el que se sentía nervioso era yo, y por primera vez desde que llegó, escuché su voz, con toda la claridad del mundo, sus labios rosados y mediadamente delgados articulaban <<Disculpa, pero ¿podrías explicarme lo que han visto durante todo este tiempo que ha pasado de semestre?>>, empecé a ponerme tenso (no sé por qué), mis manos temblaban, aunque no se notaba mucho, tomé mi cuaderno, lo abrí y comencé:

-Esto es lo que vimos el primer día, cuando el profesor se presentó, a partir de aquí los apuntes empiezan.

-Ok, muchas gracias...emmm

- ¡Ohh! Cierto, disculpa, mi nombre es Diego, ¿Y tú eres...?

-Verónica, mucho gusto y gracias.

-Por nada, si quieres, hoy durante el receso de clases puedo explicarte con más detalle todo lo que ha pasado durante el comienzo de semestre. Claro, sino te molesta.

-Me gustaría, pero...

- ¿Pero...?

No me respondió, sonó la chicharra de receso escolar, se levantó tan rápido como pudo y se fue, intenté alcanzarla, más fue inútil, se perdió entre los estudiantes.

La busqué por las bancas, los patios, las canchas, pero nada. Como si esa persona hubiera sido tan solo una simple ilusión de lo que quiero, <<Era tan bueno para ser cierto>> pensaba mientras caminaba con mi mochila en mi espalda, mirando hacia el suelo de concreto por donde caminaba, hasta que tropecé con un amigo. Me saludó, más yo no le dí mucha atención. Parece como película, pero, cuando miré detrás de él, estaba ella. Me despedí de él y fui con Verónica que estaba sentada recargada sobre una pared, sola, mirando a los demás mientras escuchaba música son audífonos. Me senté al lado de ella y comencé a hablar:

-Hola

-Hola

- ¿Te molesta si me siento?

- (Se quita los auriculares) Adelante.

-Y.... ¿de dónde vienes?

-De muchos lugares, lugares que no quiero recordar por mucho tiempo.

- ¿Por qué?

-No querrás saber, tuve problemas con algunas niñas y....prefiero no contarlo.

-Ah, disculpa por la pregunta.

-No te preocupes, mejor cuéntame, como es esta escuela.

-Te lo voy a resumir en una simple palabra: Monótona. Jamás hay algo nuevo aquí, lo más nuevo y extravagante que podrás encontrar es: la nueva llegada de una estudiante, o sea tú.

-Suena de lo más "INTERESANTE" la escuela.

-JAJAJA, hace mucho tiempo que no escuchaba a una persona ser sarcástica, aquí las personas...simplemente no entienden eso, a ellos háblales con sarcasmo o con doble sentido y no lo entienden, no quieren conocer más de lo que nos enseñan aquí, o sea, NADA.

- ¿Y cómo sabes que no quieren conocer más?

-Al igual que tú, estuve en muchos lugares, estuve en diferentes escuelas, mis profesores no solo me preparaban para confrontar la vida, me daban consejos, me enseñaron muchas cosas, aprendí mucho de una profesora en específico, pero eso es otra historia. Sé que no quieren aprender más por el simple hecho de que no salen de su círculo de confort. Yo lo tuve que hacer muchas veces para ser quien soy, y no solo eso, tuve que vivir un tiempo la vida difícil

- ¿En serio?

-Sí, primero tuve que lidiar con la muerte de mi padre, solo lo conocí durante 4 años, y cuando apenas empezaba a recordar ¡PUM!, en junio, precisamente a las 5:30 PM, llaman a mi hermano, el cual era el encargado de cuidarme, y recuerdo exactamente lo que dijeron: "Juan, trae el acta de nacimiento de tu papá, y también la de registro civil...acaba de morir". Lo curioso es, que cuando me levantaron al féretro de mi padre...jamás lloré, era tan inocente que no sabía que era la muerte, ojalá pudiera seguir así...

- ¿Qué le pasó?

-Purpura, ese es el nombre más común para el cáncer en la sangre.

- ¿Qué sentiste cuando te dieron la noticia?

- ¿Qué sentirías tú, a los 5 años, si tu madre te quitara tu juguete favorito?

- Lloraría, pero después de un rato se me olvidaría.

- ¿Respondí tu pregunta?

- Si, pero... (suena la campana)

Es raro, la primera persona a la que me atrevía a contar algo de mi vida personal. La mayor pregunta aquí es: ¿Por qué a ella? Era la primera vez que me atrevía a hacerlo, nadie conoce de mi más que mi madre (y eso a medias).

Desde mis ojosWhere stories live. Discover now