Sálvame (4°SAI)

Capítulo 25.

Giovanni.

Un año después.

Como cambia la vida en un abrir y cerrar los ojos.

Hace casi dos años atrás me obsesionada como loco por una desconocida bailarina exótica que me tenía a mil con sus sensuales movimientos.

Luego un simple día un accidente pone en mi camino a Juliana para ser ella mi mayor desafío.

¿Quién se imaginaria que la bailarina y Juliana serían la misma persona?

Si sólo a mi me pasan esas cosas.

Pero realmente me enamoré de esa perfecta muñeca que me desafiaba con la mirada y le irritaba mi presencia.

Nuestra relación es la más rara y divertida.

No cambiaría nada de todo lo que vivimos porque ahora tenemos una pequeña familia.

Juliana, Sam y el nuevo integrante Ethan Salvatore.

Mi primogénito.

Ese perfecto niño había llegado al mundo ni más ni menos que el día de la boda de mi hermana Francesa y Jayden llevándose consigo todo el protagonismo.

Se notaba que era mi hijo.

De hecho era una pequeña copia mía sólo que su cabello no sabríamos si sería claro u oscuro.

No podía ocultar mi felicidad.

Además mañana sería uno de los días más importantes de nuestras vidas.

Tanto tiempo lo esperé y al fin llegaba el día de mi boda con Juliana.

Hoy sería mi última noche de soltero y bueno debía disfrutarlo.

El día anterior las chicas llevaron a Juli a la suya y literalmente mi hermana nos había encerrado en una casa con los niños sin posibilidades de salir entonces no pudimos hacer de la nuestras y juro que casi nos volvimos locos imaginando todo lo que puedo haber sucedido en esa fiesta.

Pero cuando las vi llegar todo ese malhumor se fue cuando la tuve conmigo en mis brazos de nuevo.

Ella es sólo mía y bueno ahora de Ethan.

Miré de nuevo al pequeño que sostenía en mis brazos que dormía plácidamente luego de una buena mamadera.

Lo tengo que reconocer soy un buen padre.

A excepción de una sola vez que sin querer con Sam lo olvidamos en el interior del auto pero en mi defensa todo fue culpa de mi cuñado que venía muy entretenido con su teléfono.

Ese día literalmente Juliana casi nos mató a ambos por ser tan colgados pero aprendimos la lección rápido ya que nos hizo dormir en el auto como castigo.

Mi muñeca es única.

- ¿Se durmió? - inquiere ella entrando a la habitación de nuestro hijo.

- Si - susurro dejando un beso en su frente y lo acuesto en su cuna.

- Gracias lindo! - murmura ella abrazandome.

- ¿Cómo vas estudiando? - pregunto acariciando su cabello mientras ambos miramos con mucho amor a Ethan.

Juliana había vuelto a retomar sus estudios de arquitectura y sabía que pronto se convertiría en la mejor arquitecta de esta jodida ciudad.

- Creo que me sacaré una muy buena nota - sentencia con mucha seguridad que me hace sentir muy orgulloso de mi chica.