The Comfort Zone - BaekLay

Capítulo 10

Baekhyun sabe que no se arrepiente de su decisión cuando mira la imagen delante de él. Yixing come del plato en su bandeja y mantiene una conversación con Jongin, quien seguramente está parloteando acerca de cualquier tontería. Si él se encontrara en la misma situación, seguramente ya habría mandado a callar al moreno. Por el contrario, el castaño presta atención y se asegura de asentir para hacerle saber que lo escucha atentamente. Viéndolo con sus propios ojos, le parece que realmente disfruta de la compañía. Y eso, sinceramente, es suficiente para él.

Aunque el chico no estuviera del todo encerrado en su habitación, es consciente de que solo era cuestión de tiempo para que tuviera ese tipo de ataque de ansiedad. Por ello, sin darle muchas vueltas al asunto, tomo la decisión de dejarlo ayudar con más tareas y hasta permitir que comiera en el comedor. Es decir, que conviviera. No era la gran cosa, pero parecía haber funcionado. Su idea era mantener su cabeza ocupada para que no diera lugar a los malos pensamientos y sin duda alguna no se equivocó. Después de esa noche ninguna pesadilla volvió a molestarlo y con el paso de los días comenzó a desenvolverse poco a poco a su alrededor. Cada día que tienen la oportunidad de entrenar, Baekhyun puede ver que el cansancio lo invade más rápido de lo que solía ser en un principio, pero Yixing siempre parecía sacar la energía necesaria y suficiente para terminar. Él prefirió no entrometerse porque no era asunto suyo y aparte porque el castaño demostraba disfrutar absolutamente cada segundo de su día, lo que le decía que no se estaba obligando a hacerlo.

No obstante, las cosas también cambiaron entre ellos. Se podía sentir como la confianza afloraba y hasta el mismo había logrado sacar, aunque solo un poco, ese lado juguetón que lo caracterizaba cuando era más joven. Ahora eran capaces de prolongar una conversación y saludarse mutuamente si es que se topaban durante la jornada. Baekhyun no va a ser tan tonto como para negar lo obvio. Disfruta de su compañía y listo. Sin embargo, esto no significa que va a ir por ahí diciéndoselo a cualquiera. Todavía tenía un orgullo que conservar. Siendo totalmente franco, ha dejado de cuestionar sus acciones y simplemente se ha dejado llevar.

Se aclara la garganta cuando se da cuenta que no ha dejado de mirar a Yixing en todo el rato y pica la comida en su plato, llevándose un bocado a la boca. Chanyeol, a su lado y a quien no se le escapa nada, se da cuenta de esto y suelta una risa socarrona. Baekhyun se asegura de pisarle el pie por debajo de la mesa. Inconscientemente, sus ojos vagan de nuevo hacia el chico y se abstiene de soltar una carcajada cuando ve su rostro confundido mientras continua con su conversación con Jongin. Seguramente ya perdió el hilo de la plática, ya que el moreno tiende a hablarte de cierto tema solo para meter otros diez más y olvidarse por completo de la idea original. Demasiado tedioso para él.

En ese momento, la mirada del castaño se conecta con la suya y Baekhyun se permite lanzarle una sonrisa burlona. Yixing entrecierra los ojos, sabiendo la razón de su risa, pues en algún momento atrás recuerda haberle advertido acerca del asunto. Termina rindiéndose y dejando escapar una risa, provocando que Jongin le haga un gran puchero porque Yixing no me estas escuchando. Rompen contacto visual solo para que el castaño se gire y trate de reparar los heridos sentimientos del chico. Este parece olvidar el tema y simplemente sigue con su charla.

Baekhyun rueda los ojos y procede a levantarse, acomodando su bandeja para llevársela consigo.

—Iré a la oficina, aún tengo algo de trabajo que hacer. —le avisa a Chanyeol y el alto asiente, llenando su boca de arroz.

Antes de que pueda hacer una mueca, el sonido de cubiertos y un gran golpe seco lo interrumpen. Escucha gritos y rápidamente se mueve, dándole una mirada a su equipo, indicándoles que se levanten. No tiene que buscar mucho por el origen del alboroto, pues un tumulto de gente se ha formado en medio del comedor. Baekhyun empuja a las personas y observa a tres más en el suelo, de rodillas, rodeando a una mujer inconsciente. Esta todavía parece joven.