Es grandioso descubrir como cada pequeño detalle de mi vida constituyen a cada gran rasgo personal que me hace ser quien soy. Toda mi vida, me he sentido especial, diferente, única, autentica, artista, inventora y podría llenar hojas. Lo irónico es que lo que siento que me hace ser quien soy, no es lo que soy. Aún más irónico es saber que soy especial por algo que no puedo ver yo en mi, pero que él ve en mi. ¿Que sí ya lo tengo o lo estoy desarrollando? No lo sé, solo sé que entre más me descubro, más consiente soy de mi enorme y estúpida ignorancia. Sé que él hará la obra en mí, pero preguntas como cuando, en donde y porque me agobian fuerte cada día.
¿Por qué yo? Al reflexionar en esta respuesta, puedo ver que no soy quién debería ser, que estoy mal y me falta mucho, demasiado. Pero es irónico como soy tan afortunada de tenerlo todo. Todo para mí es el amor de Dios, que es inexplicable.
Cuando le estoy haciendo un berrinche ridículo, me consciente de una forma tan complaciente, que me hace ver lo envidiosa y odiosa que soy como hija. No con el propósito de destruirme, sino con el propósito de hacerme crecer y madurar en sabiduría.
Eso me lleva a una pregunta más difícil, ¿porque yo fui escogida?
Tantas personas afuera muriendo por la falta de amor en sus corazones. Tantas personas que necesitan de su amor. Tantas personas que están buscando llenar ese vacío existencial. Y se le ocurre escoger a mi soy perezosa, malhumorada, orgullosa, tímida, nerviosa, miedosa y también podría llenar una hoja con esto.
De solo una cosa estoy segura, algo hay en mi que posiblemente todavía no lo tenga y que no puedo ver. Pero eso me hace especial y sin importar que, voy a cumplir mi propósito.
Se lo he dicho tanto y lo repito, mi alma se aferra a su amor eterno.
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Cosas que no entiendo
PoetryEl millón de preguntas que abordan mi mente, con reflexiones que me hace cuestionarme. A pesar de eso, Dios me ama y eso es lo que más me cuesta entender. No lo merezco, pero me ama. Jamás lo mereceré, pero me ama. Divina Gracia de Dios.