Daddy ◇NamJin◇ (One Shot)

☆Día Normal☆

Narra Namjoon.

Estaba en mi escritorio, anotando en el libro escolar a sobre dos alumnos que fueron pillados en el baño a punto de tener relaciones sexuales. Se llaman Yoongi y Jimin. Esta ya es la tercera ves que los pillan. Y el acusete de Tae siempre es quien viene a acusar a sus compañeros. Dicen que esta enamorado de Yoongi.- Pf... amor juvenil.- Buje soltando un suspiro.

-Te dije que era mala idea!.- Exclamó un Jimin con brazos al aire.- Otra ves lo mismo Yoongi, así no se puede.- Se cruzó de brazos e iso un puchero con los labios.

-Quieres terminar acaso?.- Pregunto el peli negro de Yoongi.- Si es así dímelo ahora.

-No! Por favor no... no era mi intención. Me refiero a que tienes que aprender a controlarte.- Sobo la pierna del peli negro.

-Tu, la rubia pasiva, quien no se resiste a esas nalgas que tienes Jiminie.- Dijo. El comentario hizo que él contrario se sonrrojara.

-Ejem!.- Dije ronco.- Sigo aquí, si? Por favor, ya se pueden retirar.- Apunte hacia la puerta de salida. Se levantaron de sus asientos y se marcharon tomados de la mano.- Uf... algún descanso, esos dos si que tiene una vida sexual activa...

-Otra ves esos dos y el problema del baño?.- Preguntó Hoseok entrando en mi oficina. Tomó asiendo y se cruzo de piernas.- Si siguen así, el director Kim no tendrá de otra más que expulsarlos.

-Pues seria lo correcto. Serian los más felices en irse, así tendrían tiempo para ellos.- Dije mirando la pantalla de mi ordenador.- Y como va todo?

-Pues... bien, jaja.- Rió y me miro fijamente.- Y como va todo entre tú y...- no pudo terminar su oración a causa de la puerta que se abría enfrente de nosotros.- Hablando del rey de roma.- susurró mirándome pícaro.

Mi atención se posó sobre ese cabello rosado pastel, bien alborotado. Mi vista bajo y vio unos carnosos labios rosas. Wow... todo ese ser era perfecto. No tengo palabras para describirlo.

-Interrumpo algo?.- Pregunto Jin, quien se apoyo sobre el marco de la puerta.- al parecer si, por que silencio incomodo que están haciendo.- llevo su mano a su cabello para arreglarlo un poco.

-No.. no interrumpe nada director Kim...- Dios que me trage la tierra en estos momentos! Este hombre me matara!.

-Okei! Yo me retiro, las clases no se darán solas.- Dijo Hoseok poniéndose de pie y retirándose del lugar como un rayo. Hijo de puta.- Adiós! La puerta se cerro.

-Que haces?.- me pregunto Jin, quien se acercaba lentamente a mi escritorio.

-Em... firmo unos papeles...- fije mi vista en los papeles sobre mi mesa. Esa vista de Jin sentado sobre la mesa me mataba.- Y usted... no tiene nada que hacer?.- pregunte. Un nudo se formaba en mi garganta, el cual trage con dificultad.

-No, no tengo nada interesante que hacer. Se puso de pie y camino en dirección a su oficina.- Señor Kim, a mi oficina... ahora!.- Me puse de pie lo más rápido que pude y mi rostro comenzó a sudar en exceso. Di pasos lentos y seguros, uno delante del otro. Ya sabia lo que me esperaba, era algo normal, de todos los días. Pero siempre que ocurría me entraba una calor inmensa y..  los pantalones apretaban... y mucho. Al adentrarme en la oficina vi a un Jin sentado sobre su escritorio. Iso una señal con su dedo diciendo que me acerque. Cerré la puerta detrás de mi con seguro.

-Me necesitas?.- pregunte con tono pervertido. El calor y el nerviosismo se esfumó, ahora solo eramos él y yo.

-Si... te necesito dentro de mi. Ahora.- Me tomo de mi camisa y en un movimiento brusco me jalo hacia el, haciendo que los botones de esta salieran disparados en todas direcciones. Dejando al descubierto mi abdomen.- Eso me gusta.-  paso su mano lentamente sobre mi pecho, bajando con cuidado y lentitud.

-Te gustara lo que esconden mis pantalones.- Dije acercandome a Jin. Me posicione entre sus piernas, mis labios fueron juntados con los de él. Era una fusión de sabores. Los labios de Jin saben tal cual la primera ves que los probé. Esos labios me volvían loco, abrió su cavidad bucal dejando entrar mi lengua, la cual se junto con la suya. Formando una danza entre estas.- Te amo.- Dije preparándome de él un momento para tomar aire.

-Yo te amo màs.- saque con cuidado su camisa. Con una de mis manos acariciaba su rostro. Con mi otra mano libre apretaba con fuerza su trasero, lo apretaba con tanta fuerza que Jin soltaba quejidos de dolor y placer. Baje mi otra mano y apreté aun más el trasero de Jin. Lo acerque a mi, haciendo que la flexión de nuestros miembros me hiciera soltar un gemido ronco. Ya no aguantaba más, esta erección me iva a matar. Baje mis pantalones junto con los de Jin. Dejando al aire nuestras ropas interiores, que mostraban unos bultos que estaban algo mojados por el presemen. Volví a besar a Jin apasionadamente. Él acariciaba mi miembro majo el boxer. Dios que bien se sentían las manos de Jin.

-Agh...- Solté un ronco gemido. Baje a Jin de la mesa y lo posicione boca abajo sobre esta, que bella vista tenia frente a mis ojos.- Esta vista seria mucho mejor si no tuvieses ese boxer rosa puestos.- Baje los antes mencionados boxers... Wow... si que la vista era hermosa. Le pegue unas nalgadas al culo de Jin. El gemia de dolor.

-Daddy... ya... rompeme en dos..- dijo en un gemido Jin.- No dilates, quiero que me dejes en silla de ruedas. Daddy...- Dijo masajeando su miembro de arriba a abajo.

-Seguro que quieres que sea así Princesa?.- Un si salio de sus labios junto con otro gemido.- Okei..- Pose el glande de mi pene sobre la pequeña entrada de Jin. Baje una de mis manos y agarre el miembro del mismo, masajeandolo ahora yo. Introduje con dificultad el glande de mi pene. Lagrimas salieron de los ojos dd Jin.

-Mh... que... ri..co...daddy...- Jadeo Jin mordiendo si labio inferior. Luego de una estocada introduje de golpe mi largo y gordo pene.- Ahh!! Daddy.. que... bien se... siente.- Dijo con sudor y lagrimas en cara.

-Que apretado estas Jin por dios... ahg... Dios.. m...- Gemi ronco. Jin estaba la verdad muy apretado. Y eso que ayer igual lo habían echo. El pene de Nam salia y entraba una y otra ves del apretado ano de Jin. Estocadas fuertes y profundas golpeaban la maltratada próstata de Jin.

-Ah...ah..mm...ahg...ah.. más... fuerte...Daddy!!.- Grito Jin. Gran error... eso solo provoco más a Nam.

-Como tu digas princesa.- Las embestidas se volvieron cada ves más constantes y duras. Las idas y vueltas del miembro de Nam iban al compas del pene de Jin.

-Ah...ya... ya viene..mm...- dijo Jin, antes de soltar toda su esencia sobre el escritorio y un poco sobre su pecho. En eso apretó su tibia entrada. Apretando el miembro de Nam.

-Dios Jin!.- Gemia el moreno, que aun no se venia dentro de Jin. Sonidos de dos cuerpos chocando sonaban constantemente. El pene de Nam estaba ya es su punto máximo. No aguantaba más, se vendría... no dentro.

-Daddy...que... sucede?- pregunto un agitado Jin. Nam lo tomo del cabello y lo arrodilló frente a su pene. Este introdujo todo de una en la boca de jin, llegando bien adentro de su garganta. Eso fue suficiente para que Nam lo soltara todo, en la boca de su amado director. Jin se estremeció al sentir que algo venia... se habia corrido por segunda ves. Ambos soltaron un gemido fuerte que inundó la sala.

-Te lo tragaste todo?.- pregunto Nam tirándose al piso. Estaba cansado. Su pene ya no daba más. Jin se subió sobre él y lo beso. Con su mano tomo el pene de Nam y lo volvió a introducir dentro de su trasero. Empezó a dar pequeños saltitos, tu pene rebotaba con el abdomen de Nam.- Jin... porfavor detente... ahg.... no doy más.

-Tu quizás no. Pero yo si.- Sigui con lo sullo, apretaba su trasero para darle más satisfacción a su daddy.

-En fin... Nam tomo las caderas de Jin, levantandolo un poco. Ahora era Nam quien se movía rápidamente.

Esto era que de todos los días. Era algo... normal en la Vida de Nam... este solo era un día Normal para Jin y él...