-Por última vez. No voy a ir Itachi--. Dijo con seguridad a la persona que se encontraba del otro lado del teléfono, mientras bebía una copa de vino Tinto y miraba la obscuridad de la noche por el gran ventanal que poseía su lujoso apartamento en Tokio.
-Sasuke, por favor. Nuestro padre se encuentra delicado de salud, lo único que quiere es que estés el día de su cumpleaños, vamos-. Insistió el otro pelinegro al otro lado de la línea.
-Itachi cuando salí de ese pueblo a los 17 años prometí no regresar, así que no me obligues-. Dijo firme y estaba apunto de colgar hasta qué fue interrumpido por su hermano mayor en línea.
-Sasuke sólo ven este fin de semana, dos días y regresas a casa. Además, mi hija estará muy feliz de verte-. Sasuke no hizo más que soltar un suspiro, adoraba a su sobrina y usarla como anzuelo era demasiado bajo.
-Esta bien. Tu ganas, pero sólo el fin de semana. Te veo allá-. Dijo y colgó soltando un gruñido de fastidio.
Ese viernes se dirigía en tren a ese pueblo del cual había escapado en cuanto tubo oportunidad gracias a una beca escolar deportiva. Ya habían pasado 13 años de eso, en los cuales no tubo contacto con su familia más que por teléfono y ocasiones en las que su madre ó su hermano junto con su familia lo iba a visitar.
No sabía bien porqué, pero se sentía muy nervioso. La relación con su padre nunca había sido la mejor, ya que ese hombre solía ser muy exigente con él y siempre estaban en desacuerdo. Además de que su padre deseaba que Sasuke fuera un buen abogado, sin embargo Sasuke deseaba ser el mejor beisbolista del país, cosa que logró hasta que hace un año atrás se había retirado y se había vuelto entrenador del equipo más importante de todo Japón.
Se podría decir que había logrado lo que tanto deseaba, pero esto lo había hecho distanciarse de su lugar de origen. Cuando menos lo espero había llegado al fin a su parada y bajando con un semblante serio encontró a Itachi en una banca esperándole, junto a él estaba su sobrina Sarada la cual corrió hacia el para abrazarle.
-Tío Sasuke!-. Sasuke de inmediato abrazo a la pequeña que se aferraba a él con una sonrisa.
-Hola Sarada, ¿Tu madre no quiso venir?-. Cuestionó al no ver al rubio doncel de nombre Deidara con el que se llevaba tan mal.
-Deidi esta preparando la comida con mamá-. Respondió su hermano mayor, justificando la ausencia de su esposo.
-Ya veo, bueno vamos a tu casa-. Respondió el Uchiha menor soltando a la pequeña niña, empezando la caminata hacia el auto de Itachi.
-Pero tío Sasuke, no iremos a nuestra casa. Pasaremos el verano con los abuelos-. Informó Sarada con una sonrisa.
-¿Qué haremos qué? Itachi!-. Reprochó Sasuke en busca de una respuesta, obteniendo solo la sonrisa nerviosa de su hermano mayor él cual entraba al auto.
-¿Que no te lo había mencionado? Pasaremos el verano en la casa del lago, para que estés más cómodo podrás dormir en tu alcoba-. Dijo el mayor con una sonrisa sin embargo lo único que obtuvo del menor fue que entrara al auto con una expresión de irá «Por eso insistió en que viniera en tren, así no podría decidir cuándo llegará aquí». Itachi soltó un suspiro y sin más condujo en dirección a la casa de sus padres. En poco tiempo llegaron a una bella mansión a la orilla del lago en las afueras del pueblo.
-Esto será una porquería-. Dijo Sasuke al bajar del auto quitando sus gafas oscuras mientras miraba la hermosa mansión, que asemejaba a una cabaña.
-Sasuke no digas eso frente a Sarada-. Regaño Itachi por la palabra usada.
-Tienes razón, discúlpame, o y por cierto ¿Donde se metió esa pequeña bestia?-. Dijo mirando hacia el auto encontrando a la pequeña cargando una mochila y una maleta las cuales eran de él, pero sin duda lo más divertido fue ver cómo quitaba sus gafas de lectura imitándolo. -Sarada dejame ayudarte-. Dijo mientras le quitaba las maletas y mochila a la pequeña Uchiha.
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El equipo
FanfictionEstá es la historia de Sasuke, un hombre que deja todo su pasado atrás para llegar al excito de su carrera, sin embargo ahora que lo a conseguido se encuentra solo. Despues de que su padre le pida entrenar una liga infantil de beisbol, Sasuke acept...