XVI

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3:20 AM

El ambiente era frío, podía escuchar gente hablando y un par de sirenas.

Su cuerpo dolía demasiado, tanto así que le era imposible mover cualquier parte, inclusive, abrir sus ojos grises.

Aún así, sabía que alguien le estaba ayudando, pues, sentía como era levantado en alguna camilla, ¿Podía ser acaso la ambulancia?

Le hicieron abrir su ojo derecho, cegándolo con una luz blanca que no le permitió ver donde estaba, lo dejaron cerrarlo para luego abrir el otro y realizar el mismo proceso que en el primero.

Había una extraña voz conocida, llamándole y diciéndole que lo amaba.

Y las voces se volvieron más claras.

-Es un golpe a nivel cráneo encefálico, de nivel leve. Inmovilicen al paciente, sostengan el cuello. Debemos llegar a revisar que no haya alguna hemorragia -.

Ya recordaba, estaba hablando con Ofiuco cuando, suponía, alguno de sus matones le lanzó un golpe fuerte al cuello, pero en realidad, tocó su cabeza. Quizá había sido con la culata de algún arma.

Pero, lo importante ahora era saber a dónde lo llevaban, debía levantarse y huir. No le dejaría las cosas tan fáciles a Ofiuco, le haría pagar.

Reunió todas las fuerzas posibles que tenía su cuerpo y abrió sus ojos, enfocandolos en un techo blanco levemente percudido, un hombre de traje azul asomó su cara en el rostro suyo.

-¿Puede oírme? -.preguntó. Era un paramédico.

-E..estoy bien, déjenme -.intentó ponerse en pie pero, fue devuelto a la fuerza hacia la camilla.

-No puede levantarse, ahora lo llevamos al hospital para su debida revisión. Recibió un golpe contundente en su cabeza, es importante revisar la lesión -.habló manteniéndolo en su lugar.

-Al menos, ¿puedo llamar a un familiar?, se preocupará mucho si no le aviso. Será rápido -.tenía que irse, no había tiempo.

-Yo llamaré por usted -.habló la mujer buscando el teléfono móvil de Aries, este extendió su mano.

-De verdad, yo puedo llamar -.su voz se escuchaba más tranquila, incluso parecía que de verdad, nada le había sucedido.

La señora, alcanzó el móvil a Aries y, alzandolo hasta la altura de su rostro, buscó en número de Capricornio, marcándole en rojo que, le había llamado unas veinte veces hace al menos media hora.

Llamó.

Capricornio contestó al terminar el primer timbre, escuchándose preocupado.

-¿Dónde diablos estás, Aries? -.

-Capri, tuve un accidente, podrías ir al hospital a recogerme... -.mencionó

-Pero te dije que, ya saben que soy "Deer", ¡¿Cómo vas tan campante al hospital?! ¡Te reconocerán! -.estaba exaltado, hubo un silencio -¿Quieres que te topemos en el camino, no? -.

-Sí, por favor... -.suspiró, su hermano menor era un poco lento -Te veré en el hospital... -.colgó, y antes de devolver el móvil, encendió el GPS.

-No le has dicho en qué hospital -.menciono el hombre mirandole curioso.

-Me seguirá con el GPS. Él no conoce aquí, vivía en el extranjero y decidió este año quedarse conmigo, aunque le diga, no sabrá cual hospital es... -.una mentira que se ganaría el Óscar.

Relajó su cuerpo, entre los cinco podían perfectamente recogerle sin ningún contratiempo, y más que, el accidente no estaba tan lejos de su casa. Por lógica, le llevarían al hospital del centro, y de su casa a el solo había una ruta.

Fuck, I Love You {EN EDICIÓN} [Zodiaco Yaoi/Gay]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora