Sherlock 2 : Las Historias De Amelie.

T2 .Episodio 1, parte 1

La mente de Rosie vagó por una semana. Se pellizcó varias veces el brazo para comprobar que era un sueño. Pero no lo era. Era todo real. Su mejor amiga, su hermana, su todo se había ido.

En el momento de aquel terrible suceso, no tuvo tiempo de reaccionar mas que gritar. Todo era muy confuso. Recordaba una y otra vez las imágenes: Amelie y ella apuntadas por Michael y Thomas con un arma que después identificaron como falsa; Su padre y Sherlock apuntando a su vez a los varones. Y los disparos. Sobre todo, recordaba los disparos. Tres disparos, solo tres: John disparando a Michael a la pierna para derribarlo; Sherlock contra Thomas en el pecho, matándolo de un balazo rápidamente.

Y Amelie.

Y Amelie sacó su pistola del bolsillo, lista para hacerlo. Se la apoyó debajo del mentón y...disparó. Rosie jamás se iba a poder sacar de la mente el charco de sangre alrededor de su hermana. Ella gritaba y lloraba, su padre se cubría la cara para no ver el desastre ocasionado, mientras que Sherlock, miraba atontado el cuerpo de su propia hija, como si su gran cerebro no pudiera procesar lo que sucedía.

Rosie intentó pensar las razones por las que ella haría eso. Sabía que había sufrido muchísimo en el orfanato, en especial después de que sus únicos amigos, Jeremy y Lucy, fueran adoptados y enviados a Irlanda. Igualmente, no podía dar con una razón concreta. ¿Por qué tenía que ser enfrente de ella?

Lo que más le llamaba la atención era que no había nota. Hasta cuando Sherlock fingió su suicidio había dejado una "nota". Lo único que hizo Amelie fue saludar con la mano. Algo no estaba bien. Rosie sospechaba que a Sherlock tampoco le cerraba e intentaba encontrar un motivo para que ella hiciera lo que hizo.

Luego de una semana, en la que Baker Street por primera vez en muchos años estuvo en completo silencio, Rosie, Sherlock y John salieron del departamento para ir a buscar el cuerpo para enterrarlo. La niña había decidido llevar ropa negra, al menos hasta el entierro. Cuando estaban por llamar a un taxi, se dieron cuenta de que había uno ya parado, con su chofer afuera y una persona dentro.

-Taxi para Sherlock Holmes. - Dijo el hombre haciendo recordar al detective el primer caso con su amigo.

-No pedimos un taxi- Respondió John al ver que el otro no contestaba.

La ventanilla se bajó lentamente dejando a la vista una persona encapuchada, esta levantó la cabeza.

-Pero yo si- Dijo Amelie Holmes desde el auto.

Amelie literalmente fue arrastrada hacia arriba. Entendía muy bien las consecuencias de lo que había hecho. Su padre la empujó adentro furioso. Nunca lo había visto así. Rosie se acercó con la misma cara que Sherlock y le pegó una fuerte cachetada a su hermana.

-Aw... Bien, tenias derecho de hacer eso- Y luego Sherlock le pegó- Bueno, vos si que no te lo merecías.

- ¿Qué creías que estabas haciendo? - Exclamó su padre, por primera vez con un tono que un padre usaría para retar a su hija.

- ¿Disculpa? ¿Me estas retando por hacer exactamente lo mismo que vos? - Se produjo una pausa en donde padre e hija hicieron una competencia de miradas.

- Tiene razón. Son igual de dramáticos. - Agregó John.

- Además, fue solo una semana, ¡Lo tuyo dos años! - Nadie sabía que decir. Sherlock se sentó lo más tranquilo que pudo.

- Bien, ahora que volviste de la muerte ¿Cómo y por qué lo hiciste?

-Especialmente el por qué- Puntualizo Rosie.

-Bien- Revoleó los ojos Amelie- Todo comenzó cuando hablé con Thomas el viernes. Estábamos hablando de la salida del día siguiente y él dijo "Como vos decís: La familia no se trata de sangre, sino de amor." Me pareció raro, ya que a la única persona que se lo dije fue a Rosie. Solamente uní los puntos.

<<Me pasé esas dos horas en el orfanato pensando esta "estrategia". Y antes de que pregunten, fui ahí porque sabia que BlackWhite no me encontraría allá. Recordé que cuando deduje a Michael vi que tramaba algo. Solo fue cuestión de pensar un poco.

-Pero ¿Por qué? ¿Por qué suicidarte enfrente mío? - Preguntó Rosie a punto de llorar.

-No se me ocurrió otra cosa. - Cerró los ojos y ordenó sus ideas- Yo le quería decir a nuestros padres, pero no tenia pruebas de Thomas fuera BlackWhite y no quería equivocarme.

- De igual manera, lo hiciste. - Saltó Sherlock- Seguramente Molly te ayudó. Como fuiste trasladada a Barts...

-Nop. No fue ella. Fue Julie, la niña con la quien hablé por teléfono. La madre es la directora y solamente le pedí un pequeño favor. – Al ver las expresiones de los demás, suspiró. - Lo siento. Creí que, si Thomas me veía muerta, no seguiría haciéndolo. Pero mi plan se fue al traste cuando ustedes dos aparecieron. Nunca calculé eso. Mi plan estuvo en peligro, si mi padre llegaba a darse cuenta estaba frita.

-Ahora. - La apuró Sherlock- Quiero saber como hisite para dispararte.

- ¿Todavía no lo descubriste? Eso significa que lo encubrí muy bien. - Hizo una pequeña pausa para que su padre digiriera la broma- No sé si se acuerdan, pero en un momento me llevé las manos a la boca. Bueno, cuando lo hice, tenía unas placas de metal, las cuales puse dentro de mi boca. Mientras que las balas eran balas de salva. (Sé que quizás suene muy poco real, pero es que no sabia bien como hacerlo) Estuve en el hospital una semana porque me tuvieron que operar y además perdí mucha sangre. Lo siento mucho.

Sherlock estaba furioso. Obligó a su hija a subir y tomarse una ducha, mientras Rosie también subía para reflexionar. "Esa niña...Mas parecida a mi, imposible" pensó. Cuando Sherlock y John se quedaron solos, este último habló.

- Los dos son de dramáticos... Sigo sin creerme que estaba viva.

- Pues es verdad- Contestó enojado.

- No le eches la culpa. Es obvio porque lo hizo- Su amigo lo miró con el entrecejo fruncido- Lo hizo, en mi opinión, por que quiere ser igual a ti. Imagínate por lo que ella pasó y está pasando. Es famosa por ser la hija de Sherlock Holmes, no por ser ella misma. Si tu fueras famoso por ser el hermano de Mycroft estarías muy enojado.

- Pero no soy famoso por eso. - Repuso como si fuera un niño pequeño. John suspiró.

Rosie no sabia si decidirse a estar feliz o enojada. Ahora que Amelie estaba con ella y BlackWhite fuera, la vida sería mucho mas tranquila. Bueno, lo más tranquila que podía ser en Baker Street.

Ella tomó un cuaderno sin usar y un lápiz. "Si Amelie copia a Sherlock" pensó "Yo puedo copiar al mío" Y escribió lo siguiente:

"Las historias de Amelie Holmes. Por Rosie Watson"