Descaradamente empalagosos. [Vhope.]

Llegaremos tarde otra vez!

-JUNG HOSEOK!! - Dijo el peligris furioso desde la cocina, ya que por quinta vez en la semana, debia despertar a patadas a su novio para ir a la universidad.

- QUE RAYOS QUIERES TAEHYUNG, DEJAME DORMIR - Grito adormilado el pelirrojo mientras se dirijia a donde su novio gritaba enfadado mientras preparaba el desayuno.

- Llegaremos tarde otra vez si no te alistas ya mismo. - Refunfuño de brazos cruzados mientras el pelirrojo sonreia ampliamente. -Y ahora de que rayos te ries grandisimo idiota? - Revoleo los ojos bufando y llevo dos tazas de cafe a la mesa.

- Me rio de lo bonito que te ves quendo te enfadas. - Y luego de soltar una risa traviesa mientras seguia al menor, el pelirrojo lo tomo de la cintura sorprendiendo al joven mientras dejaba un dulce beso en los labios del mismo. - No te me alteres Baby, desayunamos, me alisto y salimos para la universidad. - Entonces una vez mas lo ilumino con una sonrisa a la que no se pudo resistir, haciendo que el menor mostrara una de sus bellas sonrisas rectangulares acompañada de sus rosadas mejillas abultadas, repletas de amor.

- Yaya, dejate de bobadas Hoseokie. - Dijo dirigiendose a la cocina sacudiendo su cabeza, para volver con un plato de tostadas. - Come bien, asi nos alistamos rapido...- Repitio, mientras se sentaba en frente de su Hyung para comenzar a desayunar.

Luego del desayuno, Hoseok se cambio rapidamente y salieron a tomar el tren que los llevaba a la universidad, eran unos 40 minutos de viaje, ya que esta quedaba al otro lado de Seul.

Por suerte el tren iba vacío, odiaban las epocas en que este se llenaba y viajaban apretados, viajar solos en el bagon era mucho mas comodo, ambos se sentaban al lado del otro compartiendo auriculares mientras cada uno repasaba sus apuntes.

- Bebé...- Dijo el menor mientras guardaba su cuaderno y se acurrucaba en el hombro del mayor.

De inmediato el otro guardo su libro, poniendo total atencion a su amado.

- Si amor?

- Te amo. - Sonrio mientras abrazaba a su persona favorita en el mundo. - Eres mi fresita. - Bromeo soltando una risa traviesa, la cual el mayor respondio con una leve carcajada.

- Eres un ser tan dulce Bebe, me encantas. - Sus labios se rozaron en un segundo fugaz. - Tambien te amo.- Susurro sobre sus labios, con una coz llena de ternura y adoracion por el joven y sus brillantes ojos enormes, que gracias a la suerte del destino, lo miraaban unicamente a el.

- Me sonrojas. - Dijo avergonzado el menor mientras se cubria el rostro con inocencia.

- Te ves precioso sonrojado, por eso me encanta hacer que te pongas asi. - Rio mientras quitaba las manos del peligris de su rostro, oculto tras sus largos y delicados dedos.

El menor de mejillas incendiadas simplemente respondio besando con timidez a su amente, casi como si fuese la primera vez.

Y de forma casi infantil ambos se unieron en un beso de sonrias que derretiria el corazon de cualquiera.

Los labios terciopelo del joven eran un vicio sin cura para Hoeok y aunque esa cura existiese, seguramente no la tomaria como una opcion, amaba ser adicto a el.

Los esponjosos labios rosados combinados con el leve rubor que llacia en las mejillas de Tae eran la perdicion del pelirrojo, sin hablar de su largo y sedoso cabello gris, que jugaba por sobre los ojos enormes y luminosos de su novio. A decir verdad estaba tan enamorado de aquel hombre, que hasta sus pertañas le parecian algo digno de admirar, estaba totalmente estupido y perdido por culpa de ese mocoso, pero lo amaba, con todo el corazon y con toda el alma.

Como era de esperarse, producto del deseo que ambos emanaban por el otrp, Tae se desespero y comenzo a subir el tono del beso, queria mas, mucho mas, sabia que su Hobi queria lo mismo, pero... estaban en el medio del tren, se podia?

Sus labios en una danza boraz, que casi parecia una caceria furtiva, peleaban mientras sus lenguas parecian enredarse mientras intentaban ganar una guerra civil, en la que ninguno saldria ganando.

Momentos despues se separararon por aire.

- Amor... - Jadeo agitado el mayor mientras aun estaba lo suficientemente cerca de su menor como para fundir sus respiraciones, mientras con la mirada parecian quitarse todo el abrigo que llevaban sobre sus cuerpos que gritaban a viva voz, que querian se uno nuevamente.

- Si? - Contesto agitado el peligris.

- Me la chupas? - dijo mas serio y perverso de lo que Tae podua resistir.