–Tú nunca te hubieras casado con Denis – dijo Lucas –. No era amor lo que sentías… Yo creo que estás enamorada de Oliver. En esas cartas que dices que le escribes, yo se lo diría. Es más, iría a Ottawa. O le diría que viniese él.
Nos hicimos muy amigos. Un día me dijo con cierta angustia:
–Echaba de menos a Ana y fui a la villa, a buscarla.–¿Cuánto tiempo hace que se divorciaron, Lucas?
–Bastante, por lo menos cuatro años. Pero el sábado pasado, después de hablar contigo y ver que tú también te equivocaste, decidí ir a la villa a visitar a mi familia.
–Y viste a Ana.
–No vi a Ana.
–Pero ibas a verla…
–No la borro de mi mente con facilidad. Me pasa como a tu con Oliver.
Así que fui a verla. Ella es abogada, trabajaba como abogada, pero mi padre me dijo que se había presentado a oposiciones y había logrado ser registradora de la propiedad. La destinaron fuera.
Mi padre no supo decirme donde.–No te habrás quedado así, cruzado de brazos, Lucas.
–Me quedo como tú. Yo te aconsejé que le dijeras la verdad a Oliver, que tus escrúpulos no tienen ya razón de ser, y que tú no tienes la culpa de que hayan sido hermanos.
–Sigue buscándola, Lucas …
No sé si me hizo caso. A mi casa siguió viniendo los fines de semana. Jugábamos al tenis, nadábamos, o charlábamos como dos buenos amigos.
Un día llegó Lucas y aprecié en su mirada una ilusión distinta.
–¿Sabes? Mañana domingo me voy a acercar a Astorga. Ana está destinada allí como registradora.
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Una Boda En Dos Etapas.
RomanceMappy había viajado para casarse con Denis, su novio de siempre... ¿Por qué, entonces, fue Oliver quien llegó a buscarla al aeropuerto?