Complemented | SeBaek/HunBaek

Capítulo 1

—Te he dejado la custodia de DaeYun, él es legalmente tu hijo...

—¿Q-Qué?

—Eres lo único que él tiene en este mundo y sé que lo cuidarás, yo estaré bien, los amo.

—JaeMin, ¡JaeMin! ¡No te vayas, no nos dejes! Por favor, por favor, por favor... ¡¡¡JaeMin!!!

Un llanto desgarrador lo sacó de sus sueños, BaekHyun se incorporó en la cama bruscamente, sus ojos ardían por la falta de sueño e incontables noches de llanto. Miró a su derecha y levantó con cuidado al pequeño que lloraba sin cesar, lo acunó entre sus brazos y comenzó a mecerlo en un intento por calmarlo. No sabía qué hacer, a quién acudir, estaba tan solo, tan jodidamente solo. Un nudo se formó en su garganta, quería llorar otra vez pero no podía, tenía que cuidar de DaeYun, ese pequeño ser era todo lo que tenía ahora, era su único motivo para seguir vivo.

Se levantó de la destartalada cama para ir a buscar un poco de leche, era la última mamadera que le quedaba, no sabía cómo iba a poder comprarle más al bebé pero lo haría, él iba a protegerlo como sea. Acercó la pequeña botella a los labios de DaeYun pero éste la rechazó comenzando a llorar aún más fuerte. BaekHyun temió lo peor, él sabía que DaeYun no necesitaba un cambio de pañales puesto que lo había hecho antes de dormirse y no había pasado ni media hora desde entonces, por lo tanto si no era eso y tampoco quería comer... Dirigió su mano hasta la frente del bebé y lo comprobó, estaba ardiendo en fiebre. ¿Qué iba a hacer ahora? Él vivía en un suburbio lejos de cualquier hospital, era de noche, no tenía dinero ni para un maldito taxi y cuando reparó en ese hecho BaekHyun estalló en llanto, era tan miserable, tan miserable. ''Eres lo único que él tiene en este mundo y sé que lo cuidarás...'' Las palabras de su amiga llegaron nuevamente a su memoria, no iba a rendirse, no permitiría que DaeYun lo dejara también. Envolvió al bebé entre varias mantas y salió a la fría calle, caminaría todo lo que fuese necesario, lo haría por DaeYun, él era su hijo ahora.

Eran pasada las diez de la noche y su turno en la clínica había terminado, no le quedaba más que volver a su departamento. Suspiró pesadamente mientras conducía por las calles un tanto vacías ya, ¿cuándo su vida se había vuelto tan monótona? Dios, era patético, vivía para trabajar, incluso tomaba turnos extras para pasar el tiempo y no volver tan temprano a su hogar; sin embargo, para cualquiera que lo conociese él tenía ''una vida perfecta'', es que la gente piensa que tener dinero y una buena apariencia lo es todo, no pueden estar más equivocados pensó SeHun. Quizá debería adoptar una mascota, sí, eso haría, quería un poco de compañía. Cuando llegó a su departamento fue directo a darse una ducha, después leería algún libro o quizás miraría la televisión. Sin saber por qué no tenía intenciones de dormir temprano esa noche.

BaekHyun caminaba por las oscuras calles tan rápido como le era posible, no tenía ni la más mínima idea de hacia dónde estaba yendo y temblaba de frío pues ni siquiera se preocupó en abrigarse antes de salir. DaeYun había disminuido su llanto, probablemente cansado por la fiebre. Habían transcurrido más de dos horas desde que había salido a la calle, las piernas de BaekHyun ya no daban más, miró a su alredor, no sabía dónde estaba, sólo habían edificios, parecía un lugar desierto y cuando estaba a punto de caer de rodillas al suelo completamente derrotado vio la figura de una mujer entrando a uno de los edificios, se acercó corriendo hasta ella.

—¡Ayuda, por favor, ayuda! Ayúdeme, mi bebé, él está enfermo. —Gritó desesperado BaekHyun mientras lloraba desconsoladamente—.

—¡Dios mío! ¡Este pequeño arde en fiebre! —Dijo la mujer alarmada cuando tocó el rostro de DaeYun—. Necesita ver a un médico... ¡El doctor Oh! En el edificio vive un doctor, él puede ayudarte, sólo espero que esté en casa. —Volvió a hablar la mujer al tiempo en que se apresuraba en abrir la puerta del edificio—. No puedo estar en espacios cerrados ni subir tantas escaleras así que toma el ascensor hasta el último piso, sólo hay una puerta, ahí vive el doctor Oh, sólo debes tocar el timbre.