Capítulo 17: "Sentimientos extraños"

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Un par de pelinegros se encontraban sentados mirando una bella laguna mientras comían unos cerezos al tiempo que platicaban.

Y es así como son las cosas en mi planeta, decía Milk.

En mi planeta no hay escuelas, a nosotros nos forman desde niños para ser los mejores guerreros del universo, aprendemos a leer y escribir por nuestros padres, si yo aprendí el idioma terrícola fue por iniciativa propia y con ayuda de Vegueta el príncipe de mi planeta, él es como un hermano mayor para mí, él se encargó de conseguirme libros y grabaciones del idioma terrícola y lo practicábamos entre los dos, el dinero no existe allá, lo tenemos todo a cambio de nuestro trabajo, se nos asigna un espacio para construir nuestra casita cuando estamos en edad de procreación en mi caso yo por ser como un hermano de Vegueta se me permitió que sea yo quien elija el espacio en donde construiría mi casa, comemos lo que sembramos y en cuanto a la ropa y de mas cosas, nos lo dan de manera gratuita a cambio de trabajo para el rey, decía Gokú.

Vaya, aquí si necesitas comprarte ropa, alimentos o alguna cosita para tu casa necesitas trabajar o tener una gran fortuna de que vivir, dijo Milk sonriendo.

Pues en mi planeta no es así, dijo Gokú con calma.

¿Entonces no hay centros comerciales o tiendas grandes como acá?, decía Milk.

Si, si hay muchas tiendas, allí vas a escoger la ropa o lo que necesites cada fin de mes, dijo Gokú sonriendo mientras miraba a la pelinegra haciendo que esta se sienta extraña.

Creo que es mejor volver a la cabaña, veré que puedo preparar con las cosas que tienes, dijo Milk con calma.

No tu no harás nada, yo preparare la comida para ti, dijo Gokú sonriendo.

¿Tú?, dijo Milk sorprendida.

Si yo, dijo Gokú.

¿Y qué piensas prepararme?; respondió Milk intrigada.

Lo que gustes, dijo Gokú sonriendo.

Pero si no sabes nada de comida terrícola, dijo Milk sonriendo.

Aprenderé a prepararla con tu ayuda, ¿haber dime que te gustaría que preparare?, dijo Gokú sonriendo.

Pescado, quisiera comer pescado asado, con..................., decía Milk mientras el joven de cabello alborotado la miraba como hechizado mientras la escuchaba.

Capital Central:

Un grupo de chicas platicaban dentro de un laboratorio.

Entonces el rey quiere que lo apresen para que lo fusilen, decía aterrada Dieciocho.

Si, dice que es un peligro para Milk, respondió Bulma.

Pobre, su único pecado es querer hacer cumplir el pacto, dijo Lunch.

Si, así es pero el rey no lo ve así, él dice que no permitirá que un alienígena se lleve a su hija para siempre de su lado además dice que la raza de ese joven es muy extraña, peligrosa y malvada, que tienen unas costumbres muy extrañas, que no saben lo que es el matrimonio y que una princesa no vivirá con un hombre sin estar casada con él, dice que Milk será infeliz con él por ello mientras el viva no va a permitir que su sangre se mezcle con la de un alienígena, decía Bulma.

Como quisiera estar en frente de ese bombón para decirle que se olvide de Milk y que me lleve a mí con él para ser su mujer, dijo Marón.

¡Marón¡ dijo Bulma con reproche.

¿Qué?, yo no le veo lo malo además yo no soy una princesita, respondió con ironía Marón.

Por lo mismo no creo que él te acepte, el vino aquí por su princesa no por una simple terrícola, dijo Dieciocho mientras las otras chicas asentían.

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