PARTE 8
Estás en la habitación del hospital acostada en la cama, tienes el control del televisor en la mano y solo le estás cambiando sin detenerte en ningún canal, estás demasiado aburrida, tu mamá está dormida en el sofá como siempre antes de irse a trabajar, por fin encuentras un canal que te llama la atención y te quedas viéndolo, en ese momento se abre la puerta, volteas a ver y ves a Tom entrar.
Tom camina hacía ti y te da un beso en la frente.
—Hola hermosa ¿Cómo te sientes?.
—Hola amor, estoy bien, no me han dado dolores ni nada.
Tom sonríe — Que bueno hermosa, me alegro —.
Tu mamá los escucha hablar y rápidamente se levanta del sofá, Tom camina hacia ella — Lo siento, la última clase se alargó y por eso llegué tarde, no volverá a pasar —.
—Tom no te preocupes, no tienes que disculparte — dice tu mamá mientras toma sus cosas y se despide.
—Mamá nos vemos al rato, te amo.
Ella se va y te quedas sola con Tom, lo notaste muy estresado y un poco enojado.
—Amor ¿tuviste un mal día? — le dices con voz dulce.
—Solo no tuve un buen día ¿okey? — te contesta de una manera muy brusca.
Lo tomas de la mano — Y, ¿que hiciste en la escuela? — le dices con una sonrisa.
Tom te voltea a ver muy molesto — Oye no podemos seguir así — suelta tu mano y se levanta de la silla.
—¿Amor? ¿Por qué dices esas cosas? ¿Acaso te hice algo? — sientes un vacío dentro de ti.
—Sabes que yo te amo, pero ya llevas aquí un mes y medio y han sido muy pesados para mi, me levanto temprano, voy a estudiar y saliendo tengo la responsabilidad de venir a cuidarte, me voy hasta media noche y no duermo mucho porque llego a hacer tarea.
Bajas la mirada y te dan ganas de llorar — Ósea, ¿ya te hartaste de esto? ¿Ya te hartaste de mí?.
—No es eso, solo que esto es muy difícil, no se si debamos de estar juntos.
Comienzas a llorar — ¿¡Que!? ¿Estás dudado estar conmigo? — dices con lágrimas en los ojos.
Tom comienza a llorar.
—Solo no puedo, perdóname pero no puedo.
Él toma sus cosas y se va, tú no puedes creer que Tom se marchara, te habías quedado sola cuando mas lo necesitabas, agarras una almohada y la avientas al suelo, te lastimaste un poco así que solo te recuestas y sigues llorando hasta que te quedaste dormida.Han pasado dos semanas desde que viste a Tom por última vez, hoy por fin te podrás ir a tu casa, ya estás mejor y podrás volver a tu vida normal, pero, tú no estás feliz, ya por fin habías recuperado tu vida pero habías perdido a alguien tan importante, llegas a tu casa, subes a tu cuarto y dejas algunas cosas en la cama, te acercas a tu tocador y recargas tus manos en el, ahí tenías varías fotos donde estás con Tom las tomas y comienzas a llorar, te acuestas en tu cama y solo abrazas las fotos mientras lloras, hasta que te duermes.
Al día siguiente llegas a tu escuela y las primeras clases estuviste sola, pues no habías hecho amigos ni nada, en la hora del receso vas a la cafetería y compras algo para comer, te sientas en una mesa tú sola y empiezas a comer, después de unos minutos ves a Elle entrar a la cafetería, si, ahí está la chica que era tu enemiga, la chica que te derramó el café en tu ropa, hiciste todo por ignorarla pero en ese momento ella corre hacia un chico, tú corazón se detuvo y comienzan a salir lagrimas de tus ojos, ahí estaba Tom, abrazando a esa chica, tú no podías creer lo que estabas viendo así que simplemente saliste de la cafetería llorando.
—¿Que hice mal? ¿Por qué lo perdí así de fácil? — te preguntabas una y otra vez mientras llorabas. Tú sólo querías irte a tu casa, la siguiente clase te tocaba con Tom y no querías verlo para nada, simplemente querías sacarlo de tu vida.
Vas caminando hacia el salón y antes de entrar suspiras fuerte, entras y ahí está Tom junto con Elle, ella está en las piernas de Tom, tú solo intentas llegar rápido a tu lugar pero Tom te ve.
—¿___? Ya saliste del hospital, ¿cómo estás?
Tú lo ignoras y te vas a tu asiento, Tom se sorprendió al ver tu reacción, en las siguientes clases Tom no dejaba de verte, tú seguías trabajando y lo ignorabas pero sentías tan fuerte su mirada y comenzaba a incomodarte, tú ya no sentías nada al verlo pues te había cambiado y te había abandonado cuando más lo necesitabas.
Al terminar la escuela saliste rápido de ahí, pero escuchaste a Tom gritar tu nombre mientras corría detrás de ti, eso no te importo y aceleraste el paso, tu padre estaba afuera esperando, subiste al auto y se fueron.
Por la noche estabas viendo la televisión en tu cuarto y escuchas algo afuera, te asomas por la ventana y si, ahí estaba Tom, abres la ventana y preguntas de una mala manera.
—¿Que haces aquí? No quiero ser grosera, pero no quiero verte.
—Necesito hablar contigo, por favor déjame entrar, no te quitaré mucho tiempo.
Bajas y abres la puerta, rápido suben a tu habitación en silencio para que tus padre no escuchen.
—Esta bien Tom, te escucho — dices mientras cierras la puerta, al voltear ves a Tom llorando — ¿Estás bien? ¿Por qué lloras? — le preguntas muy preocupada.
El se acerca a ti.
—De verdad lo siento mucho — en ese momento te abraza y los dos comienzan a llorar.