Lo que escribo cuando estoy rota

Por los tres

Por ti.
Por mí.
Por lo que pasó y nos marcó.
Por la tormenta que con lo nuestro arrasó.

Por ti.
Por mí.
Por los latidos de mi corazón.
Por esa puerta que se cerró.
Por mi último suspiro y tu último adiós.

Por ti.
Por mí.
Por los dos.
Por ese fuerte frío que congeló mi interior.
Por la luna que fue testigo de nuestros besos con temor.

Por ti.
Por mí.
Por los dos.
Por esos días sin tus risas.
Por esas tardes sin tu amor.

Por ti.
Por mí.
Por los dos.
Por esas cartas incompletas.
Por ese brillo que cesó.
Por las palabras nunca dichas y el recuerdo matador.
Por ti.
Por mí.
Por los dos.
Por mis huidas destructivas y tus reclamos sin pudor.
Por tus tantas indirectas y mi rostro sin expresión.

Por ti.
Por mí.
Por los dos.
Por ese enorme vacío que dejaste sin tu perdón.
Por esas noches oscuras que lloraba en mi habitación.
Por ese injusto sentimiento que pedía tu atención.

Por ti.
Por mí.
Por los dos.
Por dejarte ir entre sueños y aferrarme a tu versión.
Por tus miradas inconclusas y la duda que nació.

Por ti.
Por mí.
Por los dos.
Por esos meses que pasaron.
Por ese año que empezó.
Por la soledad que en mí crecía y tu actitud iba peor.

Por ti.
Por mí.
Por los tres.
Por la primera vez que los encontré.
Por tu actuación sin talento y su toque descortés.
Por faltarme el aliento y querer correr después.
Por sufrir en agonía cuando tú besas su piel.

Por ti.
Por mí
Por los dos.
Por los tres.