El Bosque Sagrado (sueño corto)

El Bosque Sagrado

Me encontraba en el medio de un bosque junto con 3 amigas; Artemisa, Pandora y Moros. Era otoño y las hojas amarillas, naranjas y marrones claro caían levemente en la tierra y abarrotaban inmensamente el suelo.

Eran las 6:00 am, o al menos eso se llegaba a deducir por la posición del sol, estoy de pie al frente de una represa de agua dialogando con Artemisa, ella está sentada en el borde de la represa y a su lado derecho está Pandora, parada viendo al infinito, o tal vez a las mini-olas generadas por la vibración del agua.

Mientras conversaba con Artemisa, Moros estaba apoyada sobre un árbol no muy lejos de nosotros. Pasó un silencio inquietante que se rompió con el crujido de las hojas a causa de las pisadas de Moros, caminando hacia la represa, se acercó al agua y sostuvo un poco con sus manos colocándolas en forma de bol, fue hacia mí y me arrojó el agua encima, le seguí el juego, tomé un poco de agua de la represa con mis manos, ella se quedó quieta, me acerqué y le susurre al oído "ha sí..." de una manera un tanto graciosa y deseosa, le dejé caer el agua sobre ella, la rodeé con mis brazos y la abracé, ella intentaba soltarse de manera vaga, acerqué sus labios a los míos, y le robé un beso.

Pasó 1 minuto, que pareció una eternidad, Moros se sentó en el borde de la represa, ví sus ojos y me decían "No", se le cayó el teléfono de su bolsillo, este tenía un juego de tetris abierto, pero en el juego no caían las típicas figuras, sino que caían letras, letras que conformaban mi nombre, vuelvo a ver a Moros y está llorando, ¿me pregunta —¿Por qué lo hiciste? — con la voz quebrada y débilmente. No pude responderle. Pasó 1 minuto, me desperté.