Un Secreto sin Guardar 3

¡Natasha Despierta!

Se toma la cabeza con ambas manos- condene a mis padres- cae de golpe en una silla la de los caireles.

- ¡Lluvia!- corre hacia ella el pelirrojo- ¿Qué tienes? ¿Estas bien?- angustiado.

- Di-Di-lan ¿Dilan?- se le corta la voz- condene a mis padres- con voz firme.

- No Lluvia- le quita las manos de la cabeza- tu no hiciste nada mas que seguir tus sueños, eso no es ningún pecado- la mira fijo- aparte ellos nunca te dijeron la verdad de lo que estaba pasando, tu no hiciste nada malo- sonríe de lado.

- ¡Solo intentas hacerme sentir mejor!- alza la voz con lagrimas en los ojos- soy terrible. Ellos querían que me casara con ese millonario suizo para curar a Juliett, pero ¿Qué hice yo?- las lagrimas bajan por sus mejillas- me escondí cual cobarde...- el llanto la invade por completo.

La rodea con sus brazos el pelirrojo- no digas eso cariño- acaricia sus caireles.

Interviene el abogado- será mejor que no hayas dicho ninguna de esas palabras enserio, mascota- serio.

Lo mira sorprendida- pues lo dije muy enserio, capitán- se limpia las lagrimas.

Sonríe- entonces quiere decir que ver Juliett te hizo olvidar el pasado ¿Verdad?- entrecierra los ojos retándola.

- Yo nunca olvidare mi pasado, Taylor- se levanta- por que eso seria olvidarme de quien soy- asegura con la mirada fija en el abogado.

- Entonces recuerda- coloca su mano en la cabeza de la periodista- tu eres Lluvia Cooper, actualmente Lluvia Hutson. Eres una joven periodista valiente, tenaz, necia; la cual ayudo a Sebastian y a Jade, para que ambos tuvieran el valor de admitir y demostrar su amor- alza ambas cejas- sin olvidar que eres la chica que conquisto a un chico mujeriego, olvidadizo, astuto y libertino- señala al pelirrojo.

- ¿A quien llamas mujeriego?- molesto.

- Admítelo Dilan- hace un movimiento con la cabeza quitándole importancia al asunto- en el pasado siempre tuviste fama de mujeriego, así como yo de patán- asiente.

- Tu aun tienes esa fama, así que no compares, yo deje esa mala costumbre desde que me enamore de mi adorada esposa- su mirada se posa en la periodista con cierto brillo.

Frunce el ceño- se que aun tengo esa fama, y a veces la convierto en hechos, ¡No tienes por que recordármelo!- molesto el abogado.

- Bueno- respira profundo el pelirrojo- luego arreglamos este asunto Taylor- asegura- pero debo admitir que este patán- divertido- tiene razón en casi todo- mira a la periodista- Lluvia- la toma de las manos entrelazando sus dedos- tu eres una mujer invaluable, que siempre esta ahí para las personas que te amamos- se queda callado un momento- se que cuando te alejaste de tus padres encontraste a tu verdadera familia, no solo familia de nombre o por obligación sanguínea, sino real- le da un beso en la frente- y tu nos haz demostrado que también lo somos para ti- sonríe mirándola a los ojos.

- ¿Lo vez mascota? Tu nunca condenaste a tus padres- afirma- en realidad ellos eran los que querían sacrificar la vida de una de sus hijas para salvar la de otra- mira a la psicópata unos segundos.

Tuerce la boca- pues aun que me cueste admitirlo...- respira profundo- ambos tienen cierta razón- un fantasma de sonrisa aparece en sus labios.

Abre la puerta interrumpiendo el momento- chicos, perdón por la intromisión- alza los hombros- o lo que sea que este pasando aquí; pero les tengo una notica nueva, llamaron del hospital diciendo que acaba de llegar un paciente de apellido Smith en condiciones algo precarias y va a levantar cargos- explica la detective controlando su alegría.