Encontrando el amor

Pelea

Paul no podia estar mas feliz, la cita habia sido todo un exito, pudo saborear los labios de Alexa nuevamente al dejarla en la puerta de su casa. Estaba realmente feliz y parecia mas a un cachorro con su juguete que un lobo protector de la reservacion, cuando fue a cumplir su turno de guardia.
Sam y el resto de la manada estaban feliz por su hermano, la vida no habia sido facil para el, y con el tiempo fue aislandose de todos, pero Alexa hacia que el Paul alegre y sonriente volviera. El paul que todos querian y el Paul que extrañaban.
Alexa ingreso a su casa con una sonrisa en el rostro y corrio hacia la ventana, para ver como paul salia corriendo y gritando hacia el bosque. Y solo pudo sonreir aun mas. No sabia como habia pasado, ni en que momento callo en las redes de ese chico, pero no lo podia negar mas. estaba completamente enamorada de Paul.
-Veo que te diviertes. Hablo una vos detras de la chica, quien se congeló de miedo, no queria ver detras suyo pero fue inevitable.
Apenas giro su rostro sintio un fuerte golpe que la tiro al piso.
-¿Que haces aqui? ¿Como me encontraste? Interrogó Alexa.
-No es difil, encontrar lo que quiero, y quiero que mi prometida vuelva a mi lado.
-Debes estar demenente si piensas que me ire contigo.
-¿Piensas que te lo estaba preguntando? Hablo el hombre frete a Alexa. -Tu eres mia, de mi propiedad, ¿o te olvidas que tu padre te regalo?
-No se me olvida Scott, pero saves que no mi ire sin pelear. Alexa se levanto y con un pedazo de vidrio que habia en el suelo producto de la caida, incrusto el objeto puntiagudo en el estomago de Scott y corrio a la puerta. El hombre alcanzo a dispararle a Alexa antes de que esta desapareciera en la negrura de la noche seguida por el hombre que se creia su dueño.
Alexa corria en la oscuridad, su hombro derecho le ardia a mas no poder y podia sentir la sangre escurrir por brazo; las lagrimas rebeldes caian por su mejilla, Alexa estaba asustada queria que esa pesadilla terminara Scott no podia volver a tenerla, nunca mas, ella no queria volver a su casa con sus padre y menos casarse con ese sujeto. Solo habia un lugar posible donde sentirce segura, donde sabia que la protegerian, la casa de Paul.
Seth caminaba tranquilo por el bosque disfrutando de la tranquilidad de la noche, cuando un fuerte aroma a sangre le llego a su nariz, mezclado con un aroma que apenas podia distinguir, sabia que era de una humana, pero no habia rastros de que hubiera vampiros en el area, cuando escucho un grito de auxilio corrio hacia el lugar de donde provenía.
-Paul debes venir, es Alexa.
El joven lobo apenas podia respirar frete de sus ojos estaba Alexa tirada en el suelo con un tipo sobre ella que la estaba golpeando. Sabia que tenia las de perder con ese sujeto, pero no podia dejar a la impronta de su amigo peleando sola por su vida. Rapidamente saltó sobre el hombre sacandolo de arriba de su "cuñada" esta estaba muy golpeada y lloraba. Scott parecia querer orinarce del miedo, la pistola quedo perdida en la oscuridad y Seth solo gruñia a Scott cubriendo el cuerpo de Alexa.
De la nada otro lobo salio de entre los arboles el gran lobo gris que la chica habia conocido. Al ver a Alexa herida Paul quiso saltar sobre Scott.
-Paul tranquilo. Hablo seth.
-No deja que lo mato, el la golpeo.
-Paul, asustas a Alexa. Dijo el joven lobo cuando Paul se giró para ver a su impronta, escucho como el sonido de un disparo hacia eco en el bosque.
Alexa gritaba y se hacerco corriendo hacia el lobo, Paul cayó su lentamente volvia a ser humano y antes de desmayarse pudo ver la cara de asombro de Alexa.
La pelirroja se giro como pudo para enfrentar a Scott cuando lo vieron rodeado por los Cullen. Eso fue todo no importaba si ese hombre hiba preso o lo mataban ella misma estaria feliz se apretar el gatillo, ahora era Paul su mayor preocupación. No queria perderlo.