Hospital Marino Parte 2 Acto 2

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27 de Abril

La noche... El amanecer. El olor a muerto, la sangre, sus ojos, su forma de ser, la desesperación y la libertad.

Mis pensamientos presenciales sobre la vida en este mundo. Estaba atrapado en un lugar cerrado. Claustrofóbico y oscuro. El 4 piso. Era algo incompleto. Había habitaciones sin puertas, algunas sin corrientes para los aparatos electrónicos.

Me adentré en lo posible por buscar la salida de emergencia. Vi un haz de luz rojo, y me acerqué a ahí. La puerta estaba cerrada. Carajo. Pero era la salida de emergencia. Al menos ya conocía la salida. Había un letrero al lado, decía lo siguiente:

"En caso de emergencia: por favor activar la energía en el piso 3 para poder abrir la puerta automática."

....

¿De verdad? Esto era horrible. Y si había un incendio en el piso 3, y la puerta no se abría? El sistema de emergencia era horrible. Pero después recordé, que la puerta principal estaba atascada, y había un apagón en la zona. Quizás mi escape oscuro apagó la zona de seguridad. Al menos tenía algo de sentido.

Me adentré al piso 3. Bajé con silencio por las escaleras, evité la sangre y vi el terror en mis ojos.

Había (si es que se puede usar esta palabra) un cuerpo semi-descuartizado abajo. Le faltaba gran parte del torso y otras extremidades. Tenía una mirada de horror en su cara. Casi vomito, pero me contuve. Parecía un doctor, tenía ropa especial y zapatos blancos. Ahora bañados en sangre.

Me alejé de él. Vi a una de esas cosas y me acerqué a un cubículo. Se fue. Estaba cerca. Después encontré una palanca especial en un cuarto de poder.

Habían cosas como servidores de internet, una consola local y otros aparatos. Entre esos había una palanca específica. Era la de volver energía. La accioné. Enseguida se pudo escuchar un sonido como de energía y la luz volvió. Las luces de emergencia se apagaron. Ahora era mucho más visible.

Tenía que huir rápido de ahí. Apenas me volteé una de esas cosas me agarró el brazo, estuvo a punto de morderme, no antes le dí un cachazo con la .45, le rompí media cara. Fue horrible al principio. Pero tenía que sobrevivir.

Corrí rápidamente hacia el 4 piso, fui hacia la salida de emergencia y abrí la puerta. Se escuchó una alarma ruidosa y empecé a bajar las escaleras rapidísimo. Pude también escuchar los ruidos de esas cosas, y me alenté a escapar. Llegué al primer piso por las escaleras de emergencia. Una de las puertas antes bloqueadas estaba ahora abierta. Salí cerca del ascensor, todavía dañado, y fui hacia la salida, las puertas estaban todavía atascadas. Así que junté mis fuerzas y comencé a abrirlas. Escuché algunos monstruos bajando por las escaleras, ¿cómo podían hacerlo?

No me lo pensé 2 veces y abrí las puertas. Escapé de ese infierno, encontré lo que no quería y me convencí de que tenía que tener mucho más cuidado.

Me alejé lo suficiente del Hospital Marino. Pude observar, desde lejos, que algunos de esos monstruos empezaban a salir del hospital. Salían como 5, 10, 20, 45... ¿Cuántos había ahí dentro? ¿Les estaba guiando a este mundo ahora? ¿Los saqué de ese infierno para convertir las calles principales en otro?

Me alejé de ahí y corrí lejos. Y los infectados... seguían saliendo.

La última oportunidad (The Last Stand)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora